Un Chip que puede leer la Mente

Japoneses crean un chip que puede «leer» la mente
Acercado por Marcelo Bandera

Científicos del Instituto Tecnológico de Tokio lograron que una persona mueva objetos con la mente gracias a un chip implantado en el cerebro. El descubrimiento ya se considera unos de los más impactantes para la humanidad.

Los investigadores buscan con este dispositivo ayudar a la gente con parálisis motriz parcial o total a recuperar la capacidad de vivir plenamente algunos aspectos de la vida cotidiana.

Así, por ejemplo la persona con este chip implantado será capaz de llenar un vaso con agua ayudado de una mano cibernética; encender y apagar la televisión e incluso, mover su silla de ruedas a voluntad.

Capurro on my Mind (Cuento)

Capurro on my mind
Por: Darío Valle Risoto

El eco se fue alejando, como si las voces fueran cubiertas por la dura frazada del destino, así fue, nada quedó de aquellas madrugadas más no sea los buenos recuerdos que el tiempo suele agradar por mejores y si hubo malos, también pueden transformarse en añoranzas.

 

Sentir todavía el gusto a mariguana en la boca, la fría y amigable humedad del vaso de cerveza espumeante que casi siempre era Patricia, a veces, solo a veces compraban Norteña y todo porque uno de ellos quería cambiar, en invierno cerveza negra, de cualquier marca, negra como las noches en que salían una y otra vez a recargar baterías al almacén del barrio. El gallego chocho de la vida.
Luego pasaron al vino que era mucho más barato y pegaba más, la droga se ponía cara en verano porque se iba toda para Punta del este y entonces cualquier porro apestaba a trapo viejo pero servía. Nunca probó la blanca, el polvo de ángel, la caspa de dios le daba miedo, la única coca que consumía era la de Montevideo Refrescos mientras los otros esnifaban como chanchos y hablaban de sexo y de transvertís y si Ozzy Osbourne se la comía o no.
Y cayeron de nochecita los Testigos de Jehová, era un veterano con dos pibas gordas, una de ellas estaba fuerte pero lamentablemente no aceptó la invitación a ponerla y estar un poquito más cerca del cielo. El hombre viejo se ofendió y casi los manda a cagar a todos los faloperos, peludos, anarquistas y metaleros, esbirros de satanás que se querían coger a una buena cristiana.
Se fueron los testigos del edificio, se dejaron de golpear puertas atrapando la biblia en el sobaco y dejando revistas Atalaya como regalitos junto a los felpudos de welcome. Uno de los peludos tenía una barba poblada, nariz aguileña y se llamaba Jesús pero nunca pudo caminar sobre el agua, en realidad el agua le gustaba muy poco.
El apartamento olía a semen, mariguana, vino y analgésicos de esos que vienen en bolas de colores y no dejan dormir, mezclados con alcohol rectificados hacen maravillas con el cerebro de la juventud. Ni hablar de cantar el himno nunca jamás y cuando alguna vieja habla de dios lo único que dan ganas de hacer es de tirarse un buen pedo contra el viento.
Pero contra toda predicción volvió la gorda testigo de Jehová, se llamaba Sarah y era más puta que las gallinas sino pregúntenle a los gallos de la tía Teresa. Jesús le daba por atrás mientras ella jalaba cocaína y el gordo Juan le leía la biblia en clave Rolling Stones mientras yo me meaba literalmente de risa y tenía que correr al baño sucio esquivando la mierda de los gatos.
Después se la chupaba al gordo y era una pinturita ver a dos Hipopotamitos haciéndolo mientras Jesús intentaba cambiar un vinilo y le rayaba el disco de Sabbath al dueño de casa.
__ ¡Conchatumadre! ___Gritó, mientras la gorda pegaba unos gritos orgásmicos que parecía que le daban convulsiones.
Medio exagerada.
Y entonces éramos pocos y parió la abuela, golpearon la puerta y llegó una flaca de ojos celestes con un trolito afeminado asqueroso. El gordo en pelotas los recibió de brazos abiertos con su pequeña pichila más enhiesta que mi vergüenza.
Y yo que era el único que no se excitaba con la escena.  La flaca se desnudó y el maricón se la tocó al gordo.

Me fui antes de terminar con dolor de culo por una semana, nunca se sabía como iban a terminar esas cosas, de regreso a casa medio mamadito me encontré con una piba del liceo Bauzá, habíamos sido novios en otra era.
Me miró extrañada porque yo tenía el pelo largo y una remera de Iron Maiden con Eddie transformado en momia.
La llevé al Molino medio de prepo, lo peor de todo es que mis amigos de Capurro nunca me creyeron esto ni me perdonaron que me haya ido. Tremenda orgía según Jesús y parece que el trolito todavía a más de cinco años…no se puede sentar del todo bien.

FIN

La Mano de Dios no descansa…y el pene tampoco

Un sacerdote que era responsable de un hogar para chicos pobres ubicado en Tigre fue condenado a 14 años de cárcel por haber abusado sexualmente de cuatro menores de edad, que tenían entre 11 y 14 años en el momento de los hechos.
La condena fue dictada por el Tribunal Oral en lo Criminal 7 de San Isidro contra el cura José Antonio Mercau, de 54 años. El fiscal del caso Jorge Strauss y la defensa del sacerdote, llegaron a un arreglo de juicio abreviado en donde el cura reconoció su responsabilidad en los abusos .

Vuelve Malón

¡Vuelve Malón!
Por: Darío Valle Risoto
Después de varios años de ausencia de la escena metálica Argentina vuelve Malón, la banda integrada por los restantes integrantes de Hermética luego de que Ricardo Iorio se tomara el olivo para formar Almafuerte. Malón en su momento tuvo una injusta contienda con Almafuerte que terminó luego de dos discos de estudio y un tercero en vivo y si bien se parecían mucho a Hermética tenían a favor un sonido mucho más Trash y en contra que las letras de Iorio se extrañaban.
Pueden leer la nota completa a los cuatro integrantes en la revista El Corte haciendo clic sobre el nombre.

La Menor de los Males (Cuento)

La menor de los Males
Por: Darío Valle Risoto

__ ¡Farmacia Castagneto, descuentos para el día de la madre, descuentos!
Malditos auto parlantes. Calor, un calor insoportable y apenas es Noviembre. Se viene un verano de aquellos… o de los otros.
Horacio estaba acostado boca abajo, se despertó entre el ruido molesto del locutor de la promoción y algo que le presionaba el hombro derecho. Era como una cabeza, trató de tantear con el dorso de la mano izquierda y eso le produjo una puntada en el omóplato a la altura…del omóplato, claro.
Había alguien acostado con él y no era una de sus hijas porque estaba…
¿Desnuda?
El fuerte resplandor sobre las cortinas blancas, malditas cortinas blancas que puso Gabriela aquella semana fatídica de la separación. Debió haberlas cambiado o al menos lavado, pero no son esas, esta en otro lado. Así somos los hombres solteros o asolterados. Más bien divorciados o más mal, como quiera que se entienda.
Una muchacha de buen culo acostada casi sobre él, despatarrada, cabellos castaños lacios y largos casi a la altura de unas nalgas apretadas, intensas.
Levanta una mirada con un par de ojos color miel, claros con una nariz rodeada de pecas.
__ ¡Buen día!
__ Buen…
__ ¡Que pedo nos agarramos anoche!
Ella se levanta, no es muy alta, tiene un lunar grande abajo a la izquierda de la espalda con forma de frutilla, no se preocupa en cubrirse. La cama huele a sexo, a sexo y pecado. ¿Cómo huele el pecado?
Sus pechos son un poco, tal vez algo grandes para el cuerpito delgado.
__ ¿Cuántos años tenés?
__ ¡Pero profesor!, ¡No me diga que no sabe la edad de sus alumnas!
A la mierda de vida, una noche en que seguramente hizo el amor con una menor y esa resaca impresionante que solo se podrá ir a la sombra de un calabozo frío mientras dos negros grandotes se bajan las braguetas y sacan…
Horacio se sentó en la cama más rápido que un bombero, se arregló el cabello que le quedaba y buscó las gafas sobre la mesa de luz donde una cajita de condones ya vacía es elocuente recuerdo de lo que no recuerda.
Brenda volvió del baño, luego del ruido a ducha se siente un perfume intenso sobre toda la habitación que es menos arrobador que el olor a sexo pero no menos alarmante.
__ ¿Cojimos?
__No, jugamos al ludo, como cuatro veces. ___Ella sonríe mientras se pone una pollerita a cuadros y el resto del uniforme del instituto.
Brenda, se llama Brenda, Brenda Gutiérrez, la hija del empresario dueño de los Bancos Andinos en Uruguay, vive en Carrasco y tiene más dinero para gastar los fines de semana que lo que gana Horacio  cada mes como profesor de Literatura.
Lo van a castrar, lo van a meter en cana, lo van a coger cuatro negros grandotes, mejor seis con unas tremendas ganas atrasadas y…
__ ¿No sabes donde dejé la bombacha?
__ Acá, debajo de la almohada, no se como fue a parar aquí…
__ Sesenta y nueve, se llama sesenta y nueve, anoche cuando…
__ Sesenta y nueve años le van a dar, después de que doce negros…
¿Pero como mierda siempre se le cuelan negros grandotes como parte del castigo?
Ella se pone la bombachita y Horacio repara en que también está desnudo y sufre una repentina erección como desde que tenía más o menos la edad de…
__ ¡Estás al mango papá!, ¿Nos echamos otro?
Se levantó como un rayo y corrió al baño a vomitar, el whisky, maldito whisky que nunca le gustó y el vodka que sí y el gin que más o menos y esa piba que lo abordó en el boliche y le metió la mano en la bragueta mientas sonaban Los Cadillacs que tampoco nunca le habían gustado.
Brenda al ver que no había feeling continuó vistiéndose, recogió la mochila y miró la hora, hacía como tres horas que había perdido su clase de tenis.
__ ¡Profe!, ¿Me podes llevar a casa en tu auto?
__ ¿Y el tuyo?
__ Las menores no podemos manejar.
__ Menores…de…
__Dieciocho, los cumplo el año que viene.
Horacio ya vestido y peinado parecía otro, se sentó en la cama y poco a poco se le fue ordenando el puzzle de su confusión. Brenda Gutiérrez es la mejor amiga de una de sus hijas, tiene siete hijos, cuatro mujeres y tres varones, es separado y acaba de abusar sexualmente de una piba que tiene menos edad que dos de sus retoños.
__ Me van a meter preso.
Ella fresca como una lechuga se para bien en frente de él que aún sentado en la cama intenta retornar al pasado para no…
__ No digas pavadas viejo, anoche yo te seduje y bien que te hiciste el difícil pero cuando llegamos acá, al hotel, se te fueron las bobadas. A propósito: ¿Hoy estará Lidia por la tarde?, quiero devolverle el libro de Pablo Neruda que me prestó, es una porquería.
__ Lidia es mi hija.
__ ¡Bien guacho!, Parece que la coca de anoche te sorbió la cabeza.
__ ¿Coca Cola?
__ Si de la blanca y en polvo.

Subieron al auto, era mediodía en la vereda de un hotel del centro, ella brillaba al sol como un espejismo y Horacio se sentía raro, a veces cansado, totalmente aterrado siempre y por momentos…
No le faltaba nada: Corrupción de menores, droga, alcohol y… para colmo sabía que esa muchacha no se iba a contentar con ser solo la amiga de su hija, pensó en una celda fría. Sonrió y después de todo: El mal ya estaba hecho.

FIN