El adiós a Ricardo Iorio líder del metal argentino.

El adiós a Ricardo Iorio líder del metal argentino.
Por: Darío Valle Risoto

El martes apenas llegué al trabajo mi patrón me da la noticia de que había fallecido de un paro cardíaco, esta me tomó por sorpresa pero no me sorprendió demasiado porque hace tiempo que veo en diferentes medios que Ricardo Iorio aparece desmejorado y muy avejentado en comparación con un servidor; resulta que tenemos la misma edad con solo la diferencia de cuatro meses antes en que nació él, por lo tanto al día siguiente el 25 de octubre fue mi cumpleaños. Lo pasamos con mi amiga Marcela que estaba y sigue estando inmensamente triste por la partida de nuestro referente musical de tantos años al punto de que ambos tenemos tatuado el logo de Almafuerte en un brazo.

Recuerdo siempre que alguien me preguntó una vez si me gustaría haber conocido personalmente a Iorio y le respondí que seguramente terminaríamos a las piñas porque ideológicamente estábamos en las antípodas, todos conocen su pensamiento y yo soy anarquista y por lo tanto ateo y profundamente anti militarista entre otras cosas. Con todo esto creo que Ricardo se había trabajado un personaje que le reportó tanto amigos inseparables como antagonistas totales y estoy convencido de que él fue su propio principal enemigo a la hora de ponerse a declarar en varias entrevistas con un pensamiento que alborotaba el avispero y levantaba voces airadas. Así era él en la superficie pero quienes lo conocieron profundamente cuentan que era un tipo gran amigo de los amigos y muy solidario.

¿Pero quién le quita lo bailado? De vender ajos y papas por la calle pasó a liderar tres de las cuatro bandas más influyentes del hard rock y metal argentino: V8, Hermética y Almafuerte (con la excepción de Riff), él fue el principal artífice de reinventar el panorama del metal pesado argentino incorporando ritmos autóctonos como el folklore y el tango en un estilo musical caracterizado antes por su hermetismo. Dejó unos dieciocho discos de estudio y varias actuaciones en vivo generando una gran cantidad de fanáticos y todo esto sin la necesidad de caer en las redes comerciales y negándose profundamente a salir fuera de fronteras con la excepción del Uruguay que somos como decir otra provincia argentina.

A todo esto con innumerables letras fabulosas como: Por las calles de Liniers, Gil Trabajador, Memoria de Siglos, tu eres su seguridad, etc. también encontraremos frases que delatan su profundo amor por la figura de Domingo Perón y su oposición a un pensamiento de izquierda, pero por otro lado se manifiesta a favor del nativo americano y hay canciones que delatan las injusticias sociales como: El pibe tigre y tantas otras, así que si recorremos su amplísimo repertorio será difícil separar la obra del autor aunque sea necesario a la hora de valorar los trabajos artísticos por fuera de sus creadores por la sencilla razón de que generalmente las obras los sobreviven eternamente y son el único pasaje a la inmortalidad de estos genios.

Autodefinido como un “perro cristiano” Iorio estoy convencido que era el perfecto producto de una sociedad argentina profundamente influenciada tanto por la institución militar como por la católica y aunque del sesgo espiritista Iorio creía en dios y era un férreo defensor de la figura de Perón un personaje que fraguó a la Argentina para bien y para mal con su impronta de militar pero con un sesgo populista. Defensor de las tradiciones Iorio vivía de alguna manera añorando un pasado idealizado de gestas independentistas y luchas contra malones traicioneros en fortines y emplazamientos militares de la argentina profunda, argentina que recorrió de arriba abajo llevando metal pesado a pueblos y villas olvidados.

En definitiva cuatro meses mayor que un servidor Iorio logró el sueño de tener su banda propia, cosa que a mí no se me dio, al menos por mucho tiempo y dejó un importantísimo aporte cultural que con los años estoy convencido será revalorado y aceptado como un revolucionario cambio musical en un país donde se le suele llamar rock a productos de la cultura Pop y denominar “rockeros” a pescados como Fito Páez o Cerati, ni hablar de Vicentico.

El Miércoles 25 festejamos mi cumpleaños 61 con mi amiga Marcela y mis gatos, fue un cumpleaños extraño porque la ausencia de Iorio era muy nuevita, triste pero a la vez nos dejó la satisfacción de que en nosotros dos tuvo y tiene a grandes admiradores de su obra por sobre sus deslices al ser entrevistado con sus alardes de loco lindo.

¿De verdad debemos respetar las creencias ajenas?

¿De verdad debemos respetar las creencias ajenas?
Por: Darío Valle Risoto

Continuamente advierto que quienes son seguidores o acólitos de alguna religión nos dicen a los ateos que debemos respetar las creencias ajenas y si bien pienso en que el respeto debe ser hacia todas las personas por aquello de por sobre todas las cosas respetarnos a nosotros mismos, tampoco es asunto de insultar nuestra inteligencia y seguirles absurdas conversaciones a quienes manifiestan tener fe en este o aquel dios, deidad o ser supra poderoso que desde luego es imaginario.

Cada ser humano es dueño de alucinar con lo que quiera más es notoriamente conocida aquella frase de que si alguien cree en algo sobrenatural individualmente está loco pero si son muchas las personas que creen en ello les llamamos “religiosos”.

Me molesta bastante que haya gente realmente buena, gente que de corazón siendo cristiana, judía, musulmana, budista, etc. Dedican parte de su tiempo para ayudar al prójimo de diversas formas, más me duele que sean cómplices involuntarios (O no) de estas mafias que en sus cúspides son dominadas por grandes estafadores de la razón y los bolsillos de millones de personas.

Muchas veces me he preguntado si realmente estas cabezas religiosas allí en sus pedestales de poder político y económico saben de verdad que están alimentando una gran mentira, una descomunal estafa y la violación de los principios éticos más fundamentales del hombre. Por otra parte tal vez también han sido adiestrados para creer en todo esto siendo víctimas primero y luego victimarios de la idea de que en alguna parte hay un poder “superior” creador que nos guía, nos conduce y nos destruye.

Es notorio que en las redes encontrar: “Bendiciones”, los “Amen” y que gente con la mejor de las intenciones piense que orando van a arreglar algo, a curar una enfermedad o terminar con una guerra… ¡sería tan sencillo! Quiero creer que es buena gente pero bastante ingenua aquella que piensa en que hay un mundo espiritual que nos gobierna y que somos una especie de marionetas de ese poder inconmensurable y de esta forma aunque buenas personas son como niños a los que no les cuesta nada creer tanto en reyes magos, santas Closes, dragones y doncellas, pitufos y unicornios y unas cuantas cosas más.

Como me respeto a mí mismo muchas veces me he callado preguntarles: “¿Ustedes se dan cuenta los disparates que están diciendo?” pero tampoco me quedo en seguirles la corriente porque eso si para mi es faltarles el respeto, prefiero ser duro pero honesto y decirles que soy ateo y que no creo en nada más allá de lo que la ciencia demuestra y que estoy firmemente convencido que cuando me muera muerto estaré y no habrá más nada.

El asunto es que debemos convivir en medio de estas alucinaciones colectivas y estafas majestuosas, ver como gente sencilla y buena es adiestrada por la programación que corresponde a su cultura religiosa, se pasan estos delirios de padres a hijos y así estamos cientos de años creyendo por ejemplo en el cristianismo que un tipo es a la vez hijo y dios mismo y que caminó por sobre el agua haciendo milagros para que luego en su nombre fundaran una de las mafias más poderosamente organizadas de la tierra responsable de cosas tan lamentables como la inquisición, la conquista de otros pueblos por medio de la biblia y la espada y la condena a todo lo que significa el progreso de la humanidad.

A todo esto la cultura occidental y cristiana a los tumbos ha evolucionado bastante si la comparamos con el oriente y aquellos países donde reina la cultura musulmana sumida esta en una milenaria y letárgica adoración al mismo dios judeo-cristiano pero por medio de otro profeta y la casi inamovible idea de que esa es su versión verdadera de “dios” y por lo tanto el resto del mundo somos infieles y merecemos poco menos que la muerte. Es notorio que aun dentro de otros países culturalmente muy diferentes los musulmanes emigran pero se niegan férreamente a aceptar otras visiones del mundo formando guetos donde se mantienen lo más fielmente posible a su dogma. Así educan a sus hijos manteniendo una tradición que está muy lejos de tener sus pies en este siglo y más bien parece vivir eternamente en una edad media perpetua.

Las religiones budistas, el taoísmo y otras filosofías orientales en principio tienen tal vez mayor sentido sobre todo en los aspectos “Espirituales” y en general por carecer de autoridades religiosas a nivel mundial aunque por aquí y allá siempre aparece algún gurú, maestro o guía ¡faltaba más! Que llevan a la gente por el camino que ellos consideran debe apuntar a la iluminación sobretodo de sus propios bolsillos. De todas formas no son más que otras versiones del mismo sueño de pensar que hay un mundo invisible donde habitan energías tales que es mejor seguir determinados rituales, dietas y ejercicios para estar en consonancia con este maravilloso universo, etc. , etc. y otras bobadas por el estilo.

Para terminar como decía mi madre: “Cada loco con su tema”, cada uno puede creer, tener fe o soñar con lo que le siente mejor a su demencia cotidiana y no sé si estará bien pero no los voy a respetar mucho que digamos, pero tampoco a ofender explicándoles lo que pienso, a menos de que se pongan insistentes.

Nostalgiando: ¿Los dibujitos de antes o los de hoy?

Nostalgiando: Los dibujitos de antes o los de hoy
Por: Darío Valle Risoto

Aparte de inundarnos con fotos de gatitos internet es un gran cúmulo de opiniones sobre un tiempo pasado que para muchos fue mejor aunque de ninguna manera lo haya sido y esto responde a una fantasiosa idealización de nuestra juventud y hasta de la niñez. Indudablemente aquello que vimos de niños y nos fue formando en los recuerdos que hoy atesoramos de grandes no tiene precio, más corremos el riesgo de ponernos a pensar que hoy día nada vale la pena y que todo lo pasado fue mejor.

El tema de los dibujos animados tiene a través de los años grandes obras para el recuerdo pero opino que hoy día se siguen haciendo otras tan buenas o mejores que en el pasado, aún por sobre lo técnico así mismo películas hechas casi a pulmón como por ejemplo: Blancanieves del año 1937 son prácticamente insustituibles por más que ahora aparezcan esos dementes revisionistas intentando hacer de las obras clásicas formatos políticamente correctos.

Desde luego que nunca nos podrán borrar clásicos como. Tom y Jerry, los incontables personajes de Hanna Barbera, etc., tantos momentos sentados frente a los aparatos de televisión en blanco y negro viendo “dibujitos” no tienen parangón comparando con los múltiples dispositivos que tienen nuestros niños de hoy para acceder a casi todo lo que existe en el tema. Pero eso es una visión subjetiva y personal que no tiene nada que ver con la realidad, ojalá cuando niño hubiera contado con un teléfono celular donde poder ver casi de todo en cualquier lugar.

Es injusto sostener que los dibujos de antes eran mejor, hay hoy día una oferta tan grande de diferentes personajes y estilos que decir esto solo puede ser parte de alguien que no se ha enterado o que se aferra con uñas y dientes al pasado. No hace pocos días atrás le pasé a un amigo que trabaja con niños sin hogar los dibujos animados de: “Lago tranquilo”, también le puse en el mismo pendrive la última serie de los pitufos en CGI y las nuevas temporadas de los Looney Tunes que la verdad están a la altura de aquellas que vimos de niños cuando en la escuela venían a darnos estos dibujos con un proyector ¡Y a colores! Lago tranquilo fascinó a los pibes porque es una genial animación y tiene un alto valor educativo en valores que me pregunto si hubo algo así en el pasado.

Por otro lado tenemos por ejemplo a: Oye Arnold una interesante serie del año 1996 que aborda un grupo de niños con todo lo que trae vivir en un barrio pobre, la escuela, las familias etc. No tiene desperdicio, si hablamos de locuras nada como Bob esponja pero también hay un amplio panorama de animaciones para adultos o para todas las edades desde Los Simpson, Futurama a pasar por todas las animaciones entre bizarras y raras como esa del caballo que habla y no me gustó nada o la serie de Bob´s Burguers de la que poco a poco me voy enganchando. Digamos que en el pasado solo: Los Picapiedra fue de alguna manera la precursora de una serie animada con ciertos temas adultos pero allí nos quedamos, la gran mayoría de formatos animados eran dedicados a los niños y no se pensaba en que fueran vistos por los mayores.

Es muy probable que los productores de hoy en esta gran cantidad de animaciones hayan sido aquellos niños del ayer que alucinaban con las violentas persecuciones de Tom y Jerry o las locuras del Pájaro Loco, valga la redundancia pero aunque por ejemplo hayamos alucinado con “los súper amigos” debemos reconocer que en el ámbito de animados de súper héroes hoy estamos en un momento inigualable desde el Batman animado a la fecha que aunque ya haya cumplido más de treinta años no se quedó allí y tenemos innumerables series y películas animadas tanto de Marvel como de DC que en nuestra niñez eran imposibles de imaginar.

En conclusión los animados de antes no eran mejores que los de hoy, lo que sucede que uno cae presa de la nostalgia quizás porque ha perdido aquella inocencia que nos hacía disfrutar sin demasiados análisis que Tom le quisiera cortar la cabeza a Jerry, Silvestre buscara tragarse vivo a Piolín o que el pobre coyote sufra de hambre por no poder alcanzar al correcaminos y todo por comprar malos productos de Acme. La sátira de “Rasca y Huele” que suelen mirar Bart y Lisa es por demás elocuente a la hora de recrear aquella vieja violencia “infantil” que tanto nos formó como los señores “pacifistas “de hoy día.

Iluminados, oscurecidos y sometidos

Iluminados, oscurecidos y sometidos
Por: Darío Valle Risoto

Desde que el mundo es mundo o desde que al menos algún hombre prehistórico se asomó desde su cueva y se puso a pensar en el sentido de la vida existen las religiones, desde las animistas a las presuntamente superiores que piensan en dioses metafísicos alejados de los tótems animales han pasado siglos, milenios donde la mayoría de la humanidad cree en algo, en cualquier cosa pero siempre estuvo y estará ligada a un concepto absurdo de supra existencia donde un ser o seres superiores dictan el destino de la humanidad.

Para que estas religiones prosperen no solo alcanza con el largo brazo de la costumbre y las tradiciones culturales de cada región, también son necesarios los salvaguardas de la fe que al ser portadores de la palabra de sus deidades se mantienen económica y sexualmente activos y bien provistos por las masas ignorantes y necesitadas de guía. Sabemos bien que el esclavo aún con la pérdida de su libertad vive cómodamente bajo la mirada vigilante de su amo y que probablemente ante la posibilidad de libertad absoluta preferiría ese ojo vigilante antes que depender de sí mismo.

La poderosa vigencia de las tradiciones y las instituciones que mantienen y conservan nuestras sociedades es prácticamente inamovible y solo gracias a grandes esfuerzos, sacrificios y hasta pérdidas de vidas van cambiando pero demasiado lentamente y por lo tanto a punto de llegar al primer cuarto del siglo XXI y con grandes avances en los aspectos tecnológicos aún tenemos que convivir con absurdos sistemas de creencias y cuando no con gobiernos Teocráticos en gran parte de la tierra.

No será raro encontrar grandes científicos que manifiestan su fe cristiana, a mujeres que sometidas en sus países musulmanes se sienten más cerca de su dios aunque vivan sometidas y cubiertas por tradicionales velos frente a los hombres. Tampoco es extraño encontrarnos entre personas inteligentes conque elaboran en base a sus conocimientos bíblicos toda una suerte de fantasías donde el extraño concepto del amor o la enorme mentira del libre albedrio no pueden sobrevivir a un mínimo de sentido común pero sin embargo se mantienen.

En medio de esta vorágine de mentiras los ateos militantes vivimos desafiando el estatus quo tratando de que la gente razone por lo menos por sobre unos diez años de coeficiente intelectual para saber que la Biblia no es un dechado de virtudes sino un libro infame que como tantos otros libros religiosos se ha transformado en la peor arma de destrucción masiva responsable de grandes guerras, de la perdida de la libertad de millones de personas y lo que es peor: de la sumisión de muchísima gente, aún de los creemos vivir en países laicos y sin embargo dependemos de los líderes religiosos ligados históricamente a los poderes militares y económicos más reaccionarios y conservadores.

La iglesia católica dejados los años oscuros de la inquisición ha sabido mantenerse haciendo cintura entre el fascismo y la libertad procurando por un lado darles aliento a los más desfavorecidos y por otro apoyando todos los regímenes fascistas del planeta y aún con todo esto sigue perdiendo terreno frente a los protestantes evangélicos, los tele predicadores y cada estafador que se declare pastor y levantando una Biblia en su decidida mano colabore para que la gente cambie un poco para que todo siga igual.

Por otra parte tenemos el mundo musulmán donde de alguna manera no son tan hipócritas como nosotros los occidentales y de plano tienen gobiernos teocráticos donde la religión, la política y el poder de las armas forman un todo inseparable que en algunos sitios tienen el tupé de llamar: revolución islámica y si rascamos un poco encontramos sociedades incambiadas durante siglos donde las mujeres y grupos como el de los homosexuales valen menos que un cabra o un camello. Aun así con todo lo anterior el poder de las tradiciones forma una parte tan fuerte del ADN de las personas que razonar libremente dentro de estas naciones probablemente signifique la muerte o el exilio.

Han prosperado enorme cantidad de sectas como Los testigos de Jehová, Los Mormones y otra gran cantidad de grupos menores más para quién suscribe toda religión es una secta porque separa y aísla aún en sociedad a los individuos perpetuando una serie de rasgos característicos propios para separarse de los otros, los que siguen un camino errado o los que están irremediablemente perdidos porque son ateos y por consiguiente iremos al infierno de los equivocados o libre pensadores para perder esa fabulosa oportunidad de resurrección, reencarnación o lo que sea que cuaje para que nos sigan robando la dignidad.

He visto el rostro transfigurado de mentiroso amor en quienes creen firmemente en dios, en su hijo que también es él y en la blanca paloma del espíritu santo, he tratado de ser respetuoso de esta demencia social totalmente aceptada por todo el mundo pero que se me ocurre mucho peor que el loco anónimo que piensa que es Napoleón Bonaparte y que sin embargo no trata de que yo también lo sea y solamente se siente bien de que le siga la corriente. Pero me es imposible ser un mentiroso por lo que las bendiciones deseadas sinceramente por algunas personas me molestan como una aguja en el culo y también aquellos que le dan gracias a dios por todo, hasta por sus miserias. Debo aceptar que el suspiro del: “Dios mío” me es imposible de desprender de mi ateo cerebro y solo creo que persiste en mí como prueba irrefutable de lo poderosa que es la programación religiosa en este mundo inmundo y que espero algún día desparezca para siempre.

Para terminar debo reconocer que algo he aprendido de algunas religiones orientales como el budismo en tanto tienen algunos conceptos prácticos tanto como el Tao, etc. Más si rascamos un poco también hay muchos grupos religiosos que han sabido hacer negocio de estas filosofías como los Hare Krishna y algún grupo hinduista más como así también de todos los estafadores New Age que un día sí y otro también inventan una terapia nueva, una medicina alternativa absurda que va desde la vela terapia, el Reiki y cuanta pelotudés sirva para sacarles dinero a pobres personas que creen que fuera de la medicina podrán curar sus dolencias.

No mis amigos, la vida es efímera, profundamente corta, injusta y azarosa pero es lindo vivirla y si nos despojamos de todo ese molde, esa basura generada para mantener a unos pocos iluminados habidos de sexo, fortuna y fama podremos disfrutarla en lo que nos dure. Luego solo sobreviene la nada.

¿Odiamos a las religiones?

¿Odiamos a las religiones?
Por: Darío Valle Risoto

Uno a veces valora que en ese extraño sorteo de la vida le haya tocado la fortuna de haber nacido en el Uruguay. Es que este país tiene la rara condición de si bien pertenecer al llamado: “tercer mundo” o siendo un poco más eufemistas: “países en vías de desarrollo” cuenta con un nivel cultural promedio por encima de la media mundial lo que desde luego significa que muchos de mis compatriotas son ateos o se toman las religiones bastante a la ligera o en el mejor de los casos vivimos en una sociedad ampliamente tolerante a cualquiera de estas locuras. No será raro entonces encontrar en algunos barrios algún que otro templo evangélico y de pronto algo cerca uno de esos “terreiros” de la religión umbanda y todos felices.

Incluso me atrevería a decir que hay gente como lo fue mi madre que andan pivoteando entre unas y otras religiones como si nada y que un día pueden ir a la iglesia y otro no muy separado ir a sacarse algún “daño” con la bruja del barrio. Así son las cosas de raras y extrañas en este “paisito”. Por otro lado si uno en alguna reunión porque viene al caso desliza que es ateo no habrá mayores problemas que algún pelotilla que nos invoque a discutir esos asuntos surrealistas de la fe pero nada más que eso. Me consta que en algunos países como por ejemplo los EEUU o España no es nada cómodo admitir que uno no cree en deidades, ni hablar de las naciones musulmanas donde significaría probablemente una muerte dolorosa.

Por lo tanto como anarquista si bien estoy diametralmente lejos de ser patriota alguna que otra vez debo reconocer que nacer aquí me ha hecho crecer con la posibilidad de generar mi propio pensamiento crítico aún con una madre bastante supersticiosa pero en cambio con un padre realmente genial que no creía absolutamente en nada pero fue de los hombres más buenos y solidarios que conocí en mi vida.

La pregunta del millón: ¿Odiamos, o mejor: odio a las religiones? , La verdad que no porque odiar me parece demasiado extremo y realmente más desgastante para el elemento “odiador” que para el objeto odiado, pero debo reconocer que siento un profundo desprecio por todas las religiones las que he estudiado gran parte de mi vida y que a la postre me han significado que vea con desagrado como todas, absolutamente todas se sirven de la ignorancia y debilidad de las personas para manipularlas siempre en beneficio de algún “iluminado” vivillo y estafador (O grupo de estos) que se adjudica el poder de interpretar aquella escritura o aquel personaje imaginario.

El concepto de “lo místico o sagrado” es fabuloso para escribir novelas, cómics o películas de ficción pero cuando esto forma parte de la vida cotidiana de millones de personas en todo el planeta uno no los odia por esto sino que siente una especie de vergüenza ajena por todos aquellos que consagran sus cortas y preciosas vidas en pos de un hato de fantasías.

¿Pero son felices?; Espero que sí y que por lo menos el sentido religioso les reporte eso aun teniendo otras necesidades porque ya sabemos que no hay peor ciego que el que no quiere ver y que también todo depende de con que ojo se mira. Para algunos somos la obra de algún ser inmaterial y fabuloso que no hizo así con miles de imperfecciones, defectos, fallas y alguna que otra virtud como la de pensar aunque en muchos casos uno dude de ello.

En lo personal a medida que me vuelvo viejo me he vuelto cada vez más escéptico pero a su vez soy un gran consumidor de material de ciencia ficción, fantasía, relatos asombrosos, súper héroes, etc. pero afortunadamente tuve el inmenso tesoro de crecer con el suficiente sentido de la lógica como para separar lo real de lo imaginario. Eso se lo agradezco a mi padre que siempre me decía que no le tema a los muertos que muertos están sino a los vivos y allí fui creciendo pese a estar muy interesado al menos por unos treinta años en el estudio de diversas religiones. Pero como dijo un amigo: soy ateo gracias a dios y a porque leí La Biblia.

Es que esta posibilidad de ser estas bolsas de carne y agua que además: “piensan” nos trae aparejado la constante duda sobre la existencia y subyacen pensamientos tales como encontrarle algún sentido a la vida o buscarle alguna explicación a la muerte que indefectiblemente viene por el lado de otra vida, resurrección, encarnación o la fantasía que mejor nos guste. Ante la pavorosa realidad de que nacemos, vivimos y seguro nos vamos a morir y después…nada de nada nos ponemos místicos y tomamos aquello que de acuerdo a la cultura heredada de nuestros padres nos venga mejor.

Como le explicaba un padre a su hija en una serie o película que no recuerdo cual era, cuando nos morimos volveremos al lugar en que estábamos antes de nacer el que sencillamente es la nada absoluta, la ausencia total de existencia y listo. Obvio que no es fácil asumir que estamos de paso y que a lo mejor dejaremos algún hijo, un libro, un árbol que nos perpetúe de alguna manera pero más tarde o más temprano “veremos las flores crecer desde abajo”. Entonces allí mismo radica la absurda vitalidad de miles de religiones y rituales para apañar la dura verdad y por eso me siento mil veces afortunado de carecer de esa absurda carga de andar repitiendo rituales, rezando o creyendo en que hay entidades superiores que velan por nuestras vidas como quien mira un dibujito animado luego de crearlo en algún estudio celestial.

Religión y Monarquías: Dos temas aparentemente diferentes pero no tanto

Dos temas aparentemente diferentes pero no tanto
Por: Darío Valle Risoto

Ese viejo choto del Dalai Lama se puso juguetón y se hizo chupar la lengua por un niño, que no me sorprende nada estaremos de acuerdo, sobretodo porque la iglesia católica sigue protegiendo a sus pedófilos de sotana y el tema de las religiones afortunadamente salta cada vez más seguido gracias a que las redes sociales explotan con estas sórdidas noticias.

A estas alturas en que desde el siglo pasado en adelante el mundo ha tenido adelantos tecnológicos superiores a por lo menos los quinientos años anteriores será menester repensar una y otra vez si el ser humano debe seguir creyendo en seres inmateriales, espíritus, dioses y cualquier cosa producto de su imaginación y la eterna necesidad de inventarse cuentos.

Y voy a cortar por aquí, el otro tema a raíz de también vieja discusión en España es sobre si es necesaria o no la monarquía, deberemos mirar al resto del mundo para encontrar innumerables muestras de graciosas familias que siguen heredando esa bella forma de vivir de sus pueblos y todo porque se inventaron hace unos años la tradición de que son superiores y merecen postergarse ad infinitum rascándose los huevos mientras la gente los mantiene.

Los franceses como en muchas cosas la tuvieron clara sino pregúntenle a María Antonieta o yendo medio para el este a los Zares de Rusia. En el medio por allá abajo, tenemos uno de los estados más pequeños y ricos de todo el planeta: El vaticano. Reyes y religiones se dan la mano porque ambos son la muestra indeleble del ejercicio del poder sobre las masas por medio de cuentos y patrañas que se perpetúan por años y forman parte del ADN de mucha gente.

Ese pobre niño que le dio un besito a ese viejo de túnica no llegó solo, probablemente lo arrimaron sus estúpidos e ingenuos padres como los míos que a poco de nacer me bautizaron y de adulto nunca se los perdoné. Tampoco llegaron solos a sus templos o escuelas católicas los niños abusados porque de seguro sus padres querían una educación cristiana y tan lamentable como la propia por aquello de perpetuar las tradiciones y así estamos. Por lo tanto considero que los padres son cómplices por acción u omisión de estos abusos contra seres inocentes, ni hablar de que es muy difícil que algunos adultos comprendan que no hay absolutamente ninguna prueba científica de la existencia de esa cosa llamada dios, Zeus, Odín o lo que crean mejor. Ni siquiera sabemos a ciencia cierta si existió el tal Jesús y de ser así probablemente haya sido un tipo como usted o yo que jamás hizo nada de lo que se adjudica.
Dos temas que son uno solo: monarquía y religión, la grandiosa invención de que una familia es elegida para gobernarnos porque fue elegida por dios ya debería ser parte solo de los cuentos de Disney que ha propósito algunos pelotillas están tratando de alterar para hacerlos políticamente correctos y digo yo: ¿porque mejor no abolir estos dos azotes de la lógica más pura?

Constantino: El inventor del catolicismo.

EL CREADOR DE LA IGLESIA CATÓLICA ES EL EMPERADOR ROMANO FLAVIO VALERIO CONSTANTINO II, Y SE LA LLAMÓ IGLESIA CRISTIANA UNIVERSAL.

» De cristiano no tienen ni las manos, de amor no tienen ni las pestañas, inventaron más de 2500 cosas paganas en una iglesia diabólica «

En el 325, en el concilio de Nicea, Constantino II el grande crea el catolicismo.
En el 327, Constantino conocido como el apóstol 13 y emperador de Roma, ordena a Jerónimo traducir la versión Vulgata en Latín, cambiando los nombres propios hebreos y adulterando las escrituras.
En el 431, se inventa el culto a la VIRGEN.
En el 594, se inventa el PURGATORIO.
En el 610, se inventa el título del PAPA.
En el 788, se impone adoraciones a las deidades paganas.
En el 995, se cambió el significado de kadosh(apartado) por santo.
En el 1079, se impone el celibato de los sacerdotes>>palabra totalmente católica.
En el 1090, se impone el Rosario.
En el 1184, se perpetra la Inquisición.
En el 1190, se venden las indulgencias.
En el 1215, se le impone la confesión a los sacerdotes.
En el 1216, se inventó del papa Inocenzo lll, el cuento del terror del pan (un dios de la mitología griega), que se convierte en carne humana.
En el 1311, se impone el bautismo.
En el 1439, se dogmatiza el inexistente PURGATORIO.
En el 1854, se inventa la inmaculada Concepción.
En el 1870, se impone lo absurdo de un papa infalible, en el se inventa el concepto de Contratación
Hay más de 2500 cosas inventadas por esta religión para esclavizar al ser humano con el Catolicismo.

LA HUMANIDAD ESTÁ GOBERNADA POR LA IGNORANCIA.
LA VERDAD NOS HARÁ LIBRES‼️

Progresistas, neofachos y etiquetas

Progresistas, neofachos y etiquetas
Por: Darío Valle Risoto

Hace unos días en alusión al día mundial de la mujer un individuo colgó un comentario que era algo así como que ya el argumento de las víctimas está cansando a lo que le comenté que eso nunca debería cansar y me quedé pensando en que reiteradamente veo artículos y/o comentarios donde se victimiza a los agresores y se criminaliza a los agredidos, ni que hablar si estos últimos son: mujeres, homosexuales, judíos, negros, etc. Todas las mal llamadas minorías si partimos de la hegemónica idea de que los blancos heterosexuales rubios somos más.

Por otra parte hay indudablemente todo un empuje a través de los grandes medios de comunicación por educar en el sentido de la no discriminación y la tolerancia, pero lejos estamos de un plan orquestado y concreto en ese sentido por más que los habituales loquitos de las teorías conspirativas así lo defiendan. Resulta que esto es el resultado de décadas de lucha a por una humanidad más inclusiva y por lo tanto son muchos años de airadas protestas, movilizaciones, marchas, etc. las que han dejado a muchos mártires por el camino. De allí hay una clara asociación con todo esto a los movimientos de izquierda por más que en sus orígenes también hayan sido portavoces del machismo más acérrimo cuando no de la homofobia, más era obvio que el cambio vino casi exclusivamente desde la izquierda y en menor grado de una derecha que podríamos denominar como: democrática-progresista sobre todo en los países del primer mundo, especialmente en los demócratas usamericanos.

Por otro lado hay ingentes motivos para comprender la necesidad de un cambio en el lenguaje por más que un servidor esté en contra de esas: arrobas, todos y todas y hasta esa compulsión a ponerles la letra: “e” a determinados vocablos tomados erróneamente como parte del lenguaje machista. Tenemos por ejemplo: “Chiques” en lugar de: “Chicos” o anteriormente del: “Chicos y Chicas” o el de: “Chicas y Chicos” poniendo un sexo delante o detrás del otro en lo que para mí gusto es una muy ingenua forma de saltarse un sistema de comunicación que ante todo debe ser comprendido y entendido por la mayoría y por lo tanto tenemos lo que los comunicadores llamamos: “Ruido en comunicación “que es un mensaje poco claro donde conviven diferentes formas de denominar algo con lo clásico y evitando entonces una efectiva comunicación entre las partes.

De allí que cuando desde los mismos claustros de educadores escucho o leo frases como: “Los padres y las madres” cuando la sola expresión de: “Los padres” hace alusión al conjunto de progenitores o tutores de ambos sexos de los educandos no puedo evitar sentir que se expresan así para enarbolar la etiqueta de que son progresistas o tienen la idea de que cambiando el lenguaje se logrará cambiar las injusticias lo que me parece por demás ingenuo. Pero en su defensa debo comprender que el lenguaje es un ente cambiante y que quizás en un futuro las nuevas generaciones hallen una forma universal de comprenderse mejor lejos de esa fantasía de creer que porque digo por ejemplo: “Todo” solo me refiero a los masculinos cuando en realidad el todo es el todo, o sea la totalidad de las cosas y nada tiene que ver con el sexo. Así que curiosamente la discriminación es totalmente al revés de lo que muchos creen, si es que la hubiera, porque si expreso: “Los padres” me refiero a los padres, madres y/tutores de los alumnos, más si quiere referirme exclusivamente a los padres varones deberé hacer la referencia pertinente mientras que si digo: las madres ya sabemos que son las mujeres. Por lo tanto la discriminación en realidad era hacia los varones haciéndolos parte de todo el conjunto.

Obviamente hablar o escribir así se ha transformado en una etiqueta para determinados grupos sociales léase: progresistas, sindicalistas, gente de izquierda, etc. Mientras que los supuestamente de derecha y anti todo lo anterior se niegan a cambiar su forma tradicional de expresarse. Claro que esto no es tan blanco y negro y hay matices, de todas maneras reconozco que no voy a cambiar mi forma de hablar o escribir a todo lo anterior porque creo que el idioma nada tiene que ver con el machismo sino con una antigua convención que ha dado a algunas palabras una forma determinada. Un hombre es “una” persona y una mujer es “un” ser humano y lo comprendemos perfectamente porque esto es convencional y tiene cientos de años de uso, más desde luego que podrá cambiar o no con el tiempo, el futuro dirá.
Cuando alguien me habla de esta nueva forma donde a todo le ponen: “E” suelo decirles: “Tus palabras me dan pene”

Los que yo llamaría de “Neofachos” y tal vez alguna persona al leerme me tome por uno de ellos, son aquellos que se niegan a reconocer toda la barbarie en que la humanidad ha sometido a los grupos antes mencionados y justifica estas injusticias con argumentos tan débiles como que siempre fue así o que hay una sola forma de manejar las cosas tomándose la atribución bastante absurda de creer que hay determinados roles para hombres y mujeres, blancos y negros, judíos y cristianos, etc. Hay toda una gama de los denominados “Haters” u Odiadores que diseminan sus tristes comentarios sobre los cambios que les gusten o no afortunadamente se están dando en el mundo. Más vale tarde que nunca.
Espero, eso sí que se logre una forma definitiva y convencional de expresarnos o sino estamos en el horno…o la horna.

Uruguay y la seguridad social… no muy segura

Uruguay y la seguridad social… no muy segura
Por: Darío Valle Risoto

Uruguay históricamente fue de los primeros países en el mundo donde se legisló en el tema de la seguridad social con aspectos muy humanitarios y bastante socialistas aún dentro de sus gobiernos de derechas, esto no se ha debido a la actitud de sus gobernantes sino a que siempre hubo una fuerte presencia de trabajadores y estudiantes organizados defendiendo las conquistas sociales especialmente desde los años sesenta y aún durante la dictadura hasta estos últimos años.

Pero ya hace mucho tiempo que una vez sí y otra también se habla de que tenemos una población envejecida, cosa que es cierto, y como tenemos una expectativa de vida más alta he escuchado innumerables veces que será necesario aumentar la edad de jubilación para evitar un colapso en el Banco de Previsión Social que impida pagar en tiempo y forma el justo sueldo de retiro de miles de trabajadores que ya cumplieron con años de servicio al país.

Dicho en criollo: me calienta que aún dentro de la propia izquierda este sea el argumento primero, facilongo y sencillo para castigar a las nuevas generaciones con más años de trabajo quizás porque también estos “izquierdistas” se suman a la idea de que cuantos más años productivos mejor para el país y a joderse trabajando hasta unos meses antes de estirar la pata mis viejos.

No y mil veces no, si tenemos gracias a la ciencia y a nuestra genética la posibilidad de vivir más años será para disfrutar mejor de nuestro merecido retiro, es más yo diría que habría que jubilarse luego de treinta años de aportes aunque se tengan menos de cincuenta. Entonces usted me dirá: ¡Estás loco!, ¿Cómo se van a financiar estas jubilaciones? Y entonces vuelvo a pensar que siempre se corta el hilo por el lado más fino porque en este país se gastan millones de dólares pagándoles altas jubilaciones a miles de militares lisa y llanamente porque ellos durante la dictadura se aseguraron de tener la mejor cobertura de retiro y nadie les ha tocado un pelo, aún con tres gobiernos del frente amplio.

Me pregunto yo ¿porque tienen que tener su caja separada del pueblo trabajador, si tanto argumentan que son también el pueblo? Se jubilan con todo el sueldo, con un grado más del que tenían al retirarse, reciben aguinaldo (Sueldo extra anual que no tienen los civiles) y se pueden retirar con menos de sesenta años y hasta conocí un caso de un jubilado de la aviación que se retiró con cuarenta y cinco.

Pero vuelvo al tema de la financiación y me pregunto ¿por qué en este país como en tantos otros los templos, iglesias, terreiros religiosos, etc. no pagan impuestos? Millones recaudados quedan en las arcas de sus beneméritos señores de la fe financiando sus propias campañas estafando la razón y a la gente con ese perpetuo sueño de una vida posterior y usted me dirá que muchas de estas religiones hacen sus aportes a la sociedad y bueno, entonces ¿Por qué no pagan impuestos? No lo hacen porque tenemos otro absurdo pensamiento de que las religiones están para cumplir una necesidad (No sé cuál) y que deben ser respetadas al grado de pasarle de costado al pago de contribuciones que el resto de la población si tenemos que pagar. Creo que voy a inaugurar una nueva religión o a poner un cuartel.

Dicho lo más claro posible no hay falta de dinero sino que este está muy mal distribuido y nadie ha movido un dedo para cambiar las cosas y entonces el tema de que necesariamente habrá que aumentar la edad para jubilarse es el argumento neoliberal, conservador y explotador de precisamente quienes o viven del trabajo de otros o no se la juegan en serio para solucionarlo.

Sociedad: Adictos a la ignorancia.

Adictos a la ignorancia más pura
Por: Darío Valle Risoto

Todos alguna vez hemos repetido alguna consigna y/o juicio sin tener real conocimiento de ello, después de todo no siempre hablamos con sabiduría y generalmente repetimos cosas que nos parecen más o menos acertadas de acuerdo o no a nuestros intereses particulares. Alguien dijo una vez que hasta sus propios prejuicios le definen y es algo duramente cierto, nuestros defectos tal como nuestras virtudes llenan la bolsa de lo que solemos llamar nuestra personalidad, pero no todo está perdido.

Digamos que algunas personas aprendemos de nuestros errores porque tratamos de ser inteligentes e ir evolucionando, los más sabios también aprenden de los errores ajenos. No necesitamos tirarnos debajo de un tren para saber que eso es mortal y bastante doloroso además de desprolijo. Por lo tanto los que tenemos algunos años de vida ya estamos convencidos de que podemos mejorar pero no como quisiéramos porque a diario cometemos errores. Algunas veces aprendemos de ellos y otras no.

Pero por ahí si miramos a nuestro alrededor vemos a muchas personas abrazadas a su proverbial ignorancia y como abrazados a un rencor van por la vida compartiendo su caterva de datos inciertos, costumbres suicidas y mentiras cotidianas. Los peores ciegos no son los que no ven sino aquellos que no quieren ver y entonces a menudo me he encontrado con personas que mantienen ese estatus del odio a por aquellos que son diferentes, que son pobres o que simplemente viven del otro lado de algo: digamos tanto de una frontera como de los colores de su cuadro de futbol favorito.

Probablemente ese instinto de conservación que hace que no nos tiremos debajo de un tren también nos involucra en luchas absurdas contra precisamente aquellos que tienen más en común con nosotros de lo que creemos y de forma absolutamente inconcebible nos ponemos de lado de nuestros peores enemigos. De esto se desprende que tengamos a pobres de derechas, a latinos neonazis, a personas que nacidas de una mujer son anti feministas y en definitiva a todo aquel que siendo un súper ignorante se opone precisamente a los que están de su lado porque sencillamente él o ella se creen en un sustrato superior a esta cosa llamada sociedad.

De allí no es raro tener a muertos de hambre que votan a sus patrones en los gobiernos, apoyan a sistemas militaristas abogando por una seguridad mentirosa y muy peligrosa a manos de gorilas armados o creen irreductiblemente en todo tipo de dioses, magias, adivinaciones, etc.

No es fácil sentarse a la mesa con familiares y amigos que defienden consignas aprendidas de algún aviso de Master Card o que pretenden ser esa familia “Kodak” de todos rubios y bonitos mientras viven en un asentamiento y adornan sus ranchos con las banderas del partido nacional. El síndrome: Doña Florinda pone al pobre del lado del rico y del poderoso no añorando la igualdad social, sino queriendo ser parte de la clase dirigente para tener a muchos bajo su poder.

Nos venden un estatus ficticio teniendo lo último de lo último pero nadie está obligado a comprar y por su capacidad de leer el mundo debería decodificar aquello que nos rodea y darse cuenta de que no solo los trenes nos pisan fuerte si nos ponemos debajo de sus ruedas, también las sociedades pueden atropellarnos con su enorme capacidad de envolvernos contra los de nuestra misma clase. Ni más ni menos.