Superman en la segunda temporada de Supergirl

Superman en Supergirl
Por: Darío Valle Risoto

Si bien el capítulo piloto de la primera temporada de Supergirl no me había gustado mucho, al seguir esta serie me hice bastante fan y aunque algunas adaptaciones modernas como el Jaime Olsen de raza negra me parecen que atacan la tradición de los cómics, en general la serie ha sido buena sobretodo porque se han homenajeado a personajes y situaciones que leíamos en los viejos cómics de Superman.

La historia de la prima de Kal-El está bien encarada y el agregado del Martian Manhunter ha sido una buena cosa además de la lucha con los kryptonianos de la zona fantasma, la aparición de Tornado Rojo y el capítulo donde se encuentran con Flash son algunas de las buenas cosas de esa primera temporada y hasta breves menciones y alguna superficial aparición de Superman alentaban que más tarde o más temprano habría que mostrar al héroe más grande de todos y al fin se dio.

Así que en el primer capítulo de la segunda temporada que acabo de ver en su reiteración dominguera tenemos a Clark Kent en ciudad Nacional junto a su prima y enfrentando nada menos que a John Corven el futuro Metallo, uno de los más terribles enemigos del hombre de acero. Aquí debo detenerme en el actor elegido para interpretarlo que es para mi un desconocido: Tyler Hoechtlin, que en casi nada se parece a lo hubiera preferido para este personaje pero en el devenir de este capítulo uno se comienza a acostumbrar. De todas formas me quedó la idea de que bien hubiera sido que volviera Tom Welling el actor que durante diez temporadas fuera Clark Kent en Smallville y esta vez con el traje azul pero parece que no pudo ser. Aliento de todas maneras que lo inviten para algún papel como lo hicieron con la actriz que hizo la película Supergirl y que personifica a la madre adoptiva de Kara así como Dean Cane (Las aventuras de Luisa y Clark) interpretó a su padre.

Por lo pronto comparto con ustedes algunas imágenes así como alguna trucada con esta idea que acabo de compartirles y de seguro no fue nada original de Welling como Superman, de todas formas parece que esta segunda temporada será tan buena o mejor que el debut de la prima del más grande superhéroe del planeta.

Mujer todo el año

Mujer todo el año
Por: Darío Valle Risoto

Cuando el miedo nos alcance
Y nos paralice la muerte
Con su aliento rancio
Y sus gritos dementes.

Cuando el dolor sea espanto
De lo perdido en breve
De la nostalgia acuosa
Que las lágrimas tienen.

Cuando ya no sea yo
Y vos no tengas simiente
Cuando la luna se rompa
En un río de serpientes.

Cuando todo se pierda
Cuando el sol se congele
Cuando fresca la carne
Sea ceniza crujiente.

Allí habré soñado
Con tus manos en septiembre
Con tu cuerpo en agosto
Con tus pechos: diciembre

Cuando solo tenga memoria
Para recordarte siempre
Sabré que tus nubes de mayo
Fueron mi paraíso
A tu lado
Por siempre.

Lanie Morgan: La tercera

Tercera Laine

Tercera entrega de esta joven, hermosa, voluptuosa y simpática modelo usamericana muy visitada en esta y otras páginas, bienvenida sea su frescura y buena fotogenia para engalanar a Los Muertevideanos, se aceptan comentarios.

Las crisis de las edades

La crisis de las edades.
Por: Darío Valle Risoto

Realmente no recuerdo si alrededor de los cuarenta sufrí alguna de estas crisis a las que nos tienen acostumbrados quienes creen que los números redondos significan algo, como si hubiera diferencia entre los treinta y ocho y los cuarenta y dos. Bueno, son cuatro años más o menos.

Lo cierto es que la fuerza de la costumbre nos pone en frente de estas fronteras donde a lo mejor tenemos la osadía de reírnos de nosotros mismos que de sentirnos apesadumbrados por haber llegado a cierta edad de la madurez sin haber alcanzado tal o cual meta impuesta por la sociedad y que nosotros obviamente asumimos como seres sociales. Afortunadamente no somos tan iguales entre nosotros y cada vida tiene su ritmo particular por dentro o por fuera de lo que todos asumen que debe ser o no.

De poco sirve arrepentirnos de lo que hicimos, de lo que no hicimos mucho menos y es un desperdicio de tiempo sufrir tanta nostalgia cuando justamente es con menos tiempo que antes con el que contamos, pocos sobrepasan los cien años y realmente en lo personal prefiero morirme joven y funcional que andar arrastrando una torpe existencia a merced de enfermeras y doctores.

La cosa es que el pasado es prueba y memoria, el presente es ahora y el futuro aunque a estas alturas más o menos lo tenemos previsto tiene sus sorpresas de las buenas y de las otras. Por lo pronto uno pasa esa otra frontera de los cincuenta con algo de sabiduría en el sentido de que han quedado amigos, parientes y enemigos por el camino y vaya a saber uno por que magias del destino la parca se los ha llevado antes, lo que no quiere decir que no vaya a venir a por nosotros.

De todas formas es casi inevitable caer en los: Si hubiera hecho o no hecho tal o cual cosa y eso solo es menester del terreno de la especulación y de la fantasía porque en el día a día somos el producto no solo de nuestros aciertos y errores sino también de los aciertos y errores ajenos por mal que no agrade o nos pese. Hay que vivir con eso y masticarse ciertos caramelos amargos que tiene toda existencia, es inútil repensar tanto en aquellas terribles metidas de pata que cometimos porque la máquina del tiempo no existe y si bien es terapéutico pedir disculpas siempre que se pueda, nada enmienda los malos momentos que nos regalamos por maldad o simplemente por ignorancia.

Así que no es para todo el mundo aquello de envejecer sabios y sanos rodeados de esposa, hijos, perro, propiedad, buen pasar económico y un país confortable. Creo que solo pasa en Disney o en los librillos sobre el futuro gobierno de Jehová de ya saben quienes. A lo mejor hay que conformarse con las conquistas personales sobre nuestro propio pasado que hemos sabido regalarnos no sin sacrificios, entregas y abandonos porque a eso se le llama “vida” y bueno es que la tengamos aunque nos comencemos a poner viejos y nostalgiosos.

El sistema nos dice lo que se debe o no se debe y sobre todo lo que es vivir con cierta década por delante y otras por detrás, lo que a cada etapa de la vida corresponde solo es ministerio de nuestro cuerpo y de nuestro cerebro y de cómo los hayamos cuidado para este futuro que un buen día nos despertó mirándonos las canas en el espejo y con la seguridad de que veinte años jamás volveremos a tener. Pero si encontramos una sonrisa burlona en ese viejo que nos mira y que parece otro: valió la pena.

In The heart of the Sea: Sencillamente fabulosa

The Heart of The Sea
Por: Darío Valle Risoto

Grandiosa película dirigida por Ron Howard quién ya ha demostrado con creces que es un director soberbio. En este caso se trata del relato sobre la aventura del buque ballenero Essex que terminó en naufragio y la posterior narración del grumete para inspirar nada menos que: Moby Dick, una de las obras cumbres de la literatura anglosajona.

Viendo esta película no tuve más que recordar grandes historias como la propia Moby Dick o «el Motín del Bounty» tan bien llevadas al cine en años ya pasados. Esta no tiene nada que envidiarle a aquellas enormes películas con la épica del mar que tenían la enorme virtud para aquellos que nunca pisamos un océano, de trasladarnos a épocas donde navegar era para locos u osados valientes.

El elenco de esta cruda historia sobre balleneros está liderado por el protagonista de Thor y acompañado este por el nuevo Spider-Man y quién protagonizara: Lincoln Cazador de vampiros como capitán, además del conocido actor que fuera Scarecrow en las películas de Batman de Nolan. Así que tenemos un elenco de alguna o de todas maneras signado por actores que se han desempeñado en un cine un tanto diferente a esta historia presuntamente real.

Efectos visuales de primera línea, excelente historia y actuaciones que merecen una docena de oscars hacen de esta gran aventura sobre el mar y los peligros a la caza de las ballenas una de las mejores películas de estos últimos años, no dejen de verla.

Un elenco fabuloso

The way of the Dragon: Clásico de las artes marciales

El camino del Dragón
Por: Darío Valle Risoto

Este es un clásico del cine de artes marciales de la década del setenta con todo lo que ello significa, es decir que estas películas estaban signadas por producciones de bajo costo donde el tema era presentarnos unos cuantos encuentros entre karatekas y otros expertos en las artes marciales con alguna excusa tipo venganza y/o heroísmos varios.

Pero cuando el protagonista era Bruce Lee de acuerdo en que no solo movilizaba mucho sino que cuando chicos podíamos sufrir el efecto contagio y salir de las salas con grandes ganas de meternos en un templo budista para salir tan imbatibles como el más grande de todos, afortunadamente la locura nos duraba poco.

Esta película tiene el atractivo de que podemos disfrutar de la enorme pericia de lee y también de un joven Chuck Norris que sin dudas debe ser uno de los peores actores de la historia pero también tenía un estilo de lucha muy norteamericano pero no menos interesante que el de Lee. Por lo tanto el duelo final en el coliseo romano entre ambos está excelente con gato pequeño de expectador incluido.

Más allá de la ausencia de grandes ambiciones cinematográficas no es una mala película y Bruce Lee era mucho mejor actor de lo que se esperaba guionando, actuando e incluso dirigiendo esta historia de chico que llega de China a Italia a defender a sus amigos trabajadores de un restaurante oriental asediado por mafiosos. No se la pierdan.

The Walking Dead: Mi opinión sobre el reciente estreno.

The Walking Dead
Por: Darío Valle Risoto

El lunes pasado se estrenó el primer capítulo de la última temporada de esta serie que si no me equivoco anda por la septima temporada y de la que creo solo me he perdido desde su inicio dos o tres funciones. En esta ocasión hubo mucha expectativa por la forma en que terminó la entrega anterior dejándonos con la interrogante de que personaje iba a morir tras los sucesos en que el malo de turno tiene subyugado al grupo liderado por Rick y pretende eliminar a uno de ellos como ejemplo de su poder.

Obviamente TWD es una historia de ficción sobre zombies y la forma en que sobreviven los diversos protagonistas, por ende dentro de ciertas pautas uno le va permitiendo ciertas libertades a los guionistas que navegan entre el gore de las imágenes y lo que creo más importante: la relación entre los sobrevivientes dentro y fuera del grupo.

Confieso entonces en que en el transcurso del último y esperado capítulo estuve por cambiar de canal al menos en un par de ocasiones porque el tratamiento esta suerte de tortura colectiva a la que somete el tal: “Negan” al grupo me resultó excesivamente sangrienta y por demás extendida en el tiempo al punto de sentir que me robaban una hora de mi vida.

Probablemente aquellos a los que les gusta el tema de la violencia explícita de los últimos tiempos tanto en el cine como en la televisión y otros formatos, me acusen de pacato y cosas por el estilo y lo acepto. Es probable que esté pasando por una etapa en que ya no soporte este tipo de espectáculos o porque me pongo viejo o porque de alguna manera he sido expectador presencial de algunas tristezas asociadas con enfermedad y muerte que me ponen en el difícil asunto de masticarme como extienden al infinito una secuencia que pudo durar diez minutos con idénticos resultados.

El cine y por ende la televisión se trata de mentirnos de la mejor forma posible y en este caso creo que nos mintieron mal porque todo el capítulo careció de mayores contenidos que ese despliegue sanguinario del malo contra estas pobres víctimas y más allá de quien haya muerto o no, el asunto principal para mi ha sido que el resultado no me entretuvo sino que me aburrió bastante aunque acepto que probablemente y sobretodo para las nuevas generaciones haya sido fabuloso.

La serie sufre un desgaste porque se ha extendido tal ves demasiado y la avidez de audiencias ha producido este tipo de panfleto sobre la violencia excepcionalmente gratuita que me tocó soportar dejándome con muy pocas ganas de seguir viendo la serie, espero sus comentarios.

¿Que nos guarda la memoria?

¿Que nos guarda la memoria?
Por: Darío Valle Risoto

Una lejana algarabía de niños escolares
Un llanto desconsolado en cuartos grises
Una mujer mirando despeinada
Por la ventana a ver si él viene de nuevo.
Una tristeza teñida de ocasional alegría
Todos los trenes se retiran del sueño
Y provienen del estómago las mariposas
Aquellas del amor tan adolescente.
En madrugadas borrachas y amigas
Vivimos el juego de confesiones abstractas
Y el ritmo de la seducción que conmueve
A un vagabundo que bebe un vino barato
Y se siente el hombre más millonario
Mientras todos duermen en la ciudad
De los pobres y gastados corazones.
Y ella que escribe un poema desvencijado
Con un viejo lápiz de mina quebrada
Que baila sobre la hoja virgen
Un viejo tango o tal vez una milonga
Que rescata aquel baile del club de leones
Donde el dijo si y ella aceptó la cama
De un hotel con papel tapiz con flores
Que se quebraban bajo el terremoto
De un coito interrumpido por el pensamiento
De descubrir…
¿Que nos guarda la memoria?

La Amargura (Poema)

La Amargura
Por: Darío Valle Risoto

Se rasga la tela callada de la tarde
Una flor reseca descansa
En un florero de plomo mohoso
Tus ojos están rodeados de perlas
Y no son joyas sino lágrimas
Porque sabes que te dejo sola.

La tormenta cicatriza en mil truenos
Y te veo en tu silencio nervioso
Y lamento no poder hacer nada
Por sacar este destruido amor
Del fondo de este lago de oscuridades
Donde zozobraron nuestras ilusiones.

La lluvia empapa de frío el hueco
De mi alma que se espanta quebrada
Como una rama seca que alguna vez
Solo alguna vez tuvo algunas flores
O la preciosa ilusión de multiplicar
Ese bosque de sueños crecientes.

Ya no hay nada que decir ni porque tocarnos
Estaba declarada la muerte a la tarde
En el momento triste del día nublado
En que ambos comprendimos sin hablar
Que no alcanzaba ni con siquiera el amor
Para regar de futuro este presente maldito.

(Para Liliana…)

Un espía y medio

Un espía y medio
Por: Darío Valle Risoto

La fórmula del policía blanco y el policía negro así como la del tonto y el listo siempre funciona pero ha sido tan gastada que algunas películas con guiones pobres han zozobrado a pesar de lo ante dicho. En este caso esta comedia con algo de acción sustancialmente pasa a ser por demás buena gracias al enorme carisma de Dwayne Johnson (La Roca) y la muy buena presencia del petiso Kevin Hurt.

De la mezcla despareja entre este agente de inteligencia y un viejo amigo del secundario nace una buena película que no pasará a la historia pero tiene todo su atractivo sustentado en el protagonismo de Johnson que siempre resulta un tipo absolutamente amigable haga el papel que haga porque tiene esa magia que muy pocos actores de cine han tenido para captarnos la atención y por sobre todo despertarnos más de una risa.

Buena comedia para divertirnos un rato sin ambiciones y con algún gag que puede sacarnos del sofá con una carcajada, además de todo ello la fuente de la historia parte del bullyn sufrido cuando el agente era un gordito friki en la escuela secundaria, de allí nacerá la necesidad de transformarse en cuerpo más con el devenir de la historia y aún dentro del humor podremos ver los rasgos más significativos de quienes fueron acosados en alguna parte de su vida así como de los acosadores que desde luego reciben su merecido.

Recomendable desde luego, también encontraremos algún actor secundario muy conocido para una clásica historia de matinée.