La televisión se puede apagar.

La televisión se puede apagar…
Por: Darío Valle Risoto

Técnico en Comunicación Social.

El título de este artículo remite a la respuesta de un profesor en el curso de comunicación social ante un alumno que airado despotricaba en contra de la mala programación de la tv, su publicidad, etc. Estábamos a principios de los noventa y aún no había llegado la posibilidad de internet al país, al menos con la profundidad de hoy día y ni hablar de los dispositivos móviles que llamamos “teléfonos celulares” pero obviamente son mucho más que eso y por lo tanto quizás había una mayor dependencia por la televisión en aquellos días.

La cosa es muy sencilla, “al menos por el momento” nada nos obliga a ser espectadores de algo y de nosotros es la responsabilidad de serlo o no. Recuerdo muy bien que a poco de mudarse mi compañera a casa allá por el 2004 se quedó asombrada de que en la tv cable no tuviera los cuatro canales abiertos de mi país: Uruguay, a saber: los canales 4,10 y 12 privados y el 5 que es estatal. Le dije que los había bloqueado y para que los “disfrute” los volví a poner en plantilla, el caso es que mi estimada compañera se molestaba bastante porque cada vez que quería ver algo en estos canales yo me retiraba de la habitación.

La explicación es muy sencilla, esos cuatro canales tienen una forma de comunicación y una política que no me agrada y el solo hecho de presenciar la gran mayoría de sus programaciones y ni hablar de su copiosa publicidad, me resultan un enorme insulto a mi inteligencia. Por lo tanto prefiero ver películas o series que yo elija o en el tema noticias cuando sobrevino el internet muy de vez en cuando veo RT el canal ruso de noticias o en su defecto “Telesur” y tal vez recientemente vea de vez en cuando “Tv Ciudad” que es un relativamente nuevo canal abierto en mi país pero que desde la intendencia (Ayuntamiento, alcaldía) emite una programación orientada a la cultura y obviamente con un sesgo de izquierda aunque muy moderado.

Con la radio suelo escuchar todo el día “Babel FM” que es una de las tres radios estatales pero que solamente imparte programación musical orientada a lo clásico, la música étnica, etc. Porque raramente hay o hubo programas de radios “abiertas” que me enganchen, quizás porque yo mismo hice radio en radio comunitaria es que me siento generalmente soportando músicas y locuciones que no van con mi gusto prefiriendo en todo caso poner solo música.

La excepción a la regla es escuchar: “La venganza será terrible” histórico programa argentino conducido por Alejandro Dolina pero igualmente suelo escucharlo un tiempo y me tomo largos descansos.

La paradoja del asunto es que luego de recibirme en 1994 de “Técnico en comunicación social” me he vuelto híper crítico al punto de que no puedo olvidar a una de mis alumnas cuando di clases en la biblioteca Carlos Roxlo que me dijo: “__Profesor, ahora no puedo mirar nada sin analizarlo”. Le contesté que ese es el precio de generar una conciencia crítica. Perdemos la ingenuidad y nos plantamos frente a los medios viendo que esconden estos detrás de las cortinas de sus espectáculos y escenas casi siempre frívolas o sobredimensionadas.

Recuerdo aquella vieja adicción que teníamos de chicos por ver televisión todo el tiempo y cambiar de canales buscando algo que nos guste perdiéndonos a veces la posibilidad de apagar el aparato y ponernos a leer, dibujar y porque no a conversar con nuestra familia. En épocas de dictadura la televisión comenzaba en Uruguay a las cinco de la tarde, la más disgustada con esto era mi madre, yo me ponía a dibujar o a leer comics y la iba pasando pero mi madre era una autentica fan de cualquier tipo de programa y el resultado era que manejaba un pensamiento conservador de derechas producto de consumir tanta basura mediática al punto de que me llevó años intentar que comprendiera que los canales obedecen a intereses comerciales y a la defensa de un status quo capitalista y por ende contra las clases populares.

Le explique por ejemplo que las telenovelas reiteraban una y otra vez el cuento de la cenicienta donde la empleada doméstica o chica pobre de turno invariablemente termina casándose con el hijo de sus patrones que como príncipe azul la lleva al altar en el último capítulo de un largo periplo que incluye villanos estereotipados, traiciones, equívocos y miradas fijas a la pantalla como para generar en nosotros la idea de que somos parte del cuento.

Poco a poco fue comprendiendo que la mayoría de los programas parten de la idea errónea de que los comunicadores están por encima del público y que estos son tan idiotas como para creer que todo lo que ven en la tele, escuchan en la radio o leen en los periódicos o revistas es cierto. En definitiva los medios masivos de comunicación defienden sus propios intereses y no los nuestros y ni siquiera de las mayorías sino que obedecen a una minoría adinerada y a una casta privilegiada de grandes comerciantes, banqueros, publicistas y políticos con un fuerte sesgo conservador de derechas. Y aún dentro de supuestos programas más o menos transgresores encontraremos que no se pretende cambiar ninguna estructura social para mejor sino mantener la que ya tenemos.

Hoy día los programas de radio y tv están poblados de estúpidos payasos que se hacen los cómicos o pretenden serlo, de seudo periodistas que nada investigan sino que se nutren mayoritariamente de los rumores en las redes y todo esto siempre en la persistencia que escribí antes de esa absurda idea de que el comunicador está por encima del público cuando en realidad si no hay comunicación horizontal y lineal tratando de mantener de la mejor manera posible la objetividad solamente estamos frente a operadores serviles al sistema.

The Marvels: Una bosta de grandes magnitudes.

The Marvels 2023
Por: Dario Valle Risoto

En estos últimos tiempos he discrepado bastante con los comentarios y críticas negativas sobre algunas películas del género tanto de Marvel como de DC porque al verlas me han gustado, pero no abrigaba muchas esperanzas con esta: «The Marvels» que acabo de sufrir hace unos instantes. Y si bien ya sabía que el solo hecho del protagónico de Brie Larson como la peor heroína de todos los tiempos sumada a la secuela cinematográfica de la serie: Mis Marvel y de un personaje de otra serie: Wanda-Visión como Mónica Rambeau no eran para esperar una gran película al menos pensaba que podría ser por lo menos entretenida…nada de eso.

Con el Dr Strange creía que Marvel nos traía la peor película pero se superó con Capitana Marvel y esta es la tercera cereza negativa en la enorme bosta de torta que la nueva dirección de Marvel está tomando a saber: seguir las directivas de Disney en cuanto a la inclusión, escenas de baile y/o canto y argumentos dirigidos a nenas bobas de doce años. Perdónenme pero tenía que compartirlo de esta forma por más que alguno se ofenda. Probablemente por ahí estoy demasiado viejo y por eso me duermo viendo este intento de aventura espacial con un argumento más errático que Mary la vizca. Ni siquiera ese maravilloso gato virtual salva la cosa por más que nos atiborren de afiches con su preciosa carita, ni los adorables gatitos corriendo por una base espacial y ni siquiera la hubiera salvado que al menos matarán a la insoportable heroína remedo Marvel de Supergirl.

Lo peor de todo esto es que lo mejor de la película es la escena post créditos, así que si tienen la oportunidad la corren toda hasta esos minutos finales en que aparece el Bestia de la primera trilogía original de los X-Men agregándole más inconsistencias a una historia de mierda. Les hago el espoiler porque quiero que no pierdan hora y media de vida viendo tal porquería, me lo van a agradecer.

The Last samurai 2003: Más que una extraordinaria película épica.

The Last samurai 2003
Por: Darío Valle Risoto

Parece mentira que se cumplen nada menos que dos décadas del estreno de esta película que quizás sea una de las mejores aventuras épicas de la historia del cine con una puesta en escena magistral y un elenco poderoso.

Pero debo ser sincero: Tom Cruise es un tipo que nunca me cayó del todo bien, quizás porque esta enfermo con la cosa de la ciensiología o porque estuve celoso de que pasara las noches con Nicole Kidman pero la verdad que nunca me ha atrapado. Eso sí, debo reconocer que en esta película se luce y mucho, además por tratarse de un ex soldado yanqui que viaja al Japón a fines del siglo XIX durante la transformación de esta nación hacia la modernidad tenemos la resistencia de antiguos samuráis encarnados por dos actores (Me saco el sombrero) de la enorme calidad de un Ken Watanabe y Hiroyiki Sanada y esto le da a la película un nivel inconmensurable, todo esto y más invitan a verla.

Con una gran historia ambientada e inspirada en hechos reales aunque se cambien algunas o bastantes cosas tenemos la lucha del pasado contra el futuro en una tierra distante donde las tradiciones intentan sobrevivir al embate de la modernidad de occidente a la fuerza de ser necesario. Así que es lógico que nos obliguemos a pensar en que dejaríamos por el camino buscando mayor confort pero que este implica de muchas formas acabar con nuestro propio pasado.

Me quedo con la viuda que debe cuidar al asesino de su marido, con los valores que chocan entre oriente y occidente, cada uno con una idea propia pero que sin embargo como todo en la vida hay relaciones que se establecen aún entre personajes tan distantes como pudieron serlo los Samuráis y los extintos pieles rojas. Hay también una cierta grandeza en morir en batalla y no por morir sino pro luchar por lo que se cree justo y cierto, aun sabiendo que nuestro enemigo es mil veces más poderoso en número pero que sin embargo está muy atrás en ciertos valores.

En definitiva el último Samurái es una grandiosa fieta épica, una gran película y le pido disculpas a Tom Cruise…por casi todo.

Appaloosa: La amistad en tiempos del viejo oeste.

Appaloosa 2008
Por: Darío Valle Risoto

Este western protagonizado por Ed Harris quién además de seguir demostrando que es uno de los mejores actores de todos los tiempos aquí también coescribe y dirige por si nos quedaban dudas de su calidad. Viggo Mortensen lo acompaña en esta historia del oeste usamericano donde estos dos colegas y amigos son contratados como pistoleros para “pacificar” el pueblo que le da nombre a la película y como es de costumbre en versiones latinas aparece como: “Entre la vida y la muerte”, lo que bien podría ser el título del 99% de las películas de este género.

Digamos que en el western usamericano hay una clara distinción entre el antes donde los indios eran los malos y los cowboys se peleaban sin ensuciarse ni perder el peinado y la modernización con películas donde se apela a mayor realismo que lo antedicho y se revisa con mejor tino esa época salvaje. De todas maneras sigo sosteniendo que el western italiano llamado de muy mala manera: “Western espagueti” fue el generador de que se tratara de mostrar hasta “la mugre y fealdad” de estos tiempos contra los impolutos héroes de antaño.

Appaloosa tiene una gran historia sobretodo ahonda en la amistad de dos auténticos caballeros que ni aún una mujer que según hubiera dicho mi madre: “es más puta que las gallinas” puede separar y todo esto con un asesino prácticamente impune y casi dueño de la comarca magistralmente interpretado por otro monstruo de las pantallas que es indudablemente: Jeremy Irons. Por ahí tenemos a algún otro conocido en una película que tiene lo suyo y que he vuelto a ver luego de tantos años y me ha vuelto a enganchar lo que no es poca cosa mis amigos.

The Creator 2023: Inteligencia no tan artificial

The Creator 2023: Inteligencia no tan artificial.
Por: Darío Valle Risoto

En un futuro no tan lejano se detona una bomba nuclear en la ciudad de Los Ángeles y se culpa a la inteligencia artificial, la que es prohibida y occidente inicia así una guerra con Nueva Asia que defiende esta forma sintética de vida, comandados por los EEUU (Aunque parezca increíble). Así tenemos a un agente infiltrado que intenta contactar con Nirvata un científico que en el continente asiático ha logrado un notable avance en la IA, por otro lado a través del satélite “Nomad” los Estados Unidos tienen en jaque a quienes pretenden que tanto hombres como androides puedan vivir en completa armonía.

Tenemos aquí a probablemente una de las mejores películas de ciencia ficción de los últimos años: con un elenco fabuloso, efectos especiales increíbles y una fotografía por momentos con reminiscencias a “Blade Runner”, pero esta película tiene brillo propio con mucha acción y sobre todas las cosas un guion que invita a pensar en este mundo que comenzamos a forjar con medios electrónicos cada vez más auto pensantes y que muy probablemente en pocos años pongan en jaque toda la filosofía de vida de los seres de carne y hueso.

Escrita, producida y dirigida por Gareth Edwards esta película es fabulosa por donde se la intente analizar y eso dentro de un género usado y abusado ad infinitum tiene mucho de valor, al menos para mí. Con alguna asociación fácil con la guerra de las galaxias porque este director supo dirigir una de las tantas y repetidas secuelas de esta saga hay mucho para ver en “El Creador” y que a quienes somos fanáticos del género también nos recuerda a los cuentos de Robots de Asimov y tantas joyas de anticipación que la lista sería increíblemente larga. Afortunadamente.

Qué bueno que cada vez que uno piensa que el cine usamericano se transforma en esa bosta que trae: “Barbies y La la Lands” aparezcan joyas de este calibre.

El Hombre que fabricaba Monstruos 1941

El Hombre que fabricaba Monstruos 1941
Por: Darío Valle Risoto

Lon Chaney en el mismo año en que filmó la fabulosa y épica película del Hombre lobo aparece en esta interesante historia de un científico que pretende “purificar” al ser humano por medio de la bioelectricidad. No sé si esta película es anterior o posterior a la citada del licántropo pero también aquí tenemos un gran lucimiento de Chaney, más no debemos olvidar al siempre dejado de lado Lionel Atwill, gran intérprete de esos años actor recurrente en cuanta historia de la Universal u otras galas lo comprendan.

Probablemente no contó con la apostura de un Karloff o de un Lugosi pero tuvo el señor Atwill una destacada filmografía que siempre será bueno repasar los que tenemos esta afición por recorrer el cine “viejo”. Especialmente se destacó en la tercera y última aparición de Boris Karloff como el monstruo de Frankenstein en la denominada: El hijo de Frankenstein de 1939.

Pero debemos imperiosamente detenernos en este “fabricante de monstruos” que es un relato proveniente de la historia de un hombre que gracias a resistir a la electricidad sobrevive a un accidente y se presta a sucesivos experimentos eléctricos que terminan por transformarlo en un asesino, una vez más tenemos la trilogía de: creador, monstruo y chica que tantos frutos nos han dado en este cine súper clásico donde los finales no siempre son perfectos.

Hace pocos días conversando con un pibe de unos veinte años este me decía que no le gustan las películas en blanco y negro por lo que me sentí muy triste porque desde luego se va a perder un fabuloso cine que tiene pequeñas joyas como esta y otras más grandes donde la ausencia de color quizás sea parte importante de generar esas atmósferas góticas tan europeas y con un clima pocas veces recuperado en el futuro.

The Cyclops 1957 : ¡Ojo con el monstruo!

The Cyclops 1957
Por: Darío Valle Risoto

Del enorme caudal de películas de ciencia ficción-terror de aquellos años encontramos esta joyita rodada en blanco y negro con un escaso presupuesto que nos trae a un Lon Chaney ya maduro y otros tres integrantes de un vuelo a una ignota zona de México en busca de los restos de una fallida expedición científica rastreando materiales radiactivos.

La única señorita de la historia cree firmemente que su marido perdido sigue vivo aunque hayan pasado tres años de aquel suceso y todos encontrarán una enorme sorpresa entre las montañas cubiertas de radioactividad; es que junto a los delirios sobre invasiones alienígenas (Léase miedo a la infiltración comunista) tenemos las películas sobre las mutaciones a raíz de experimentos nucleares.

A poco de una década del fin de la segunda guerra mundial el cine de Hollywood ya está perfectamente entronizado en la cúspide del entretenimiento mundial, más no es necesario hilar demasiado fino para saber que se exportan monstruos e ideología por igual. Poblada de efectos especiales bastante someros pero funcionales “El ciclope” funciona bien para una buena matinée y una hora y muy poco más y tiene a Chaney interpretando a un veterano más interesado en la prospección del radio (Uranio) que de encontrar al posible marido perdido.

La tengo en una carpeta denominada “Gente gigante” donde entra prácticamente de todo con la mujer de cincuenta pies como verdadera joya de este tipo de cine extra grande en sus dos versiones a la fecha.

Milei y la cultura del atropello en la Argentina.

Milei y la cultura del atropello
Por: Darío Valle Risoto

Uno a primeras vistas y con tan solo escuchar hablar a Javier Milei pensaría que es un hombre que no está del todo bien de la cabeza y que ninguna persona mínimamente sensata lo querría de presidente de la nación Argentina, pero ya sabemos que uno de los principales errores de la democracia es que pueden votar todos… hasta lo ignorantes y/o imbéciles.

El tema que no me canso de repetir cuando los uruguayos hablamos de nuestro querido país hermano es que en la argentina la izquierda prácticamente es inexistente y me refiero a términos electorales porque me consta que si hay socialistas, comunistas y anarquistas como un servidor, etc. pero son pocos ya que una de las características del peronismo fue ganarse a las clases populares con acciones populistas que le dieron justicia social a su país pero desde luego sin tocar las estructuras del poder.

Como nos decía una recordada profesora de filosofía en el liceo nocturno: “Se pretende cambiar un poco para que todo siga igual” y este personaje va a más de lo mismo, es decir: “Que los ricos sean cada vez más ricos y los pobres que se jodan y se caguen de hambre”, eso básicamente es el neoliberalismo y nada me demuestra lo contrario.

El discurso de la motosierra solo puede ser aceptado por personas que son sumamente estúpidas o que están muy frustradas por la vida, al punto de creer que todos los males de la sociedad son porque hay ayudas sociales y un estado más o menos asistencialista, mientras que la realdad demuestra que las estructuras de usura y explotación del hombre por el hombre permanecieron intactas en la argentina aún con los gobiernos de los Kirchner. Obviamente que estos gobiernos fueron mucho mejores que cualquier otro en este país en los al menos últimos cincuenta años pero una infatigable y denodada campaña mediática en contra fue victoriosa a la hora de poner las cartas sobre la mesa, para colmo los dos candidatos principales que se oponían a Milei eran poco menos que darle la razón con los absurdos anteriormente expuestos porque. ¡Por favor!

Veremos qué pasa, lamentablemente desde el Uruguay sufrimos y bastante por una nación que tiene todo para ser grandiosa y sucumbe una y otra vez a la mentalidad de los terratenientes, los militaristas, los dueños de los grandes medios de comunicación y los mafiosos de la iglesia católica. Reitero el pensamiento de “cambiar un poco para que todo siga igual”, este tipo no va a cambiar nada para mejor sino que pretende volver a hundir a su propio pueblo en la debacle capitalista que ha dado a su país una deuda externa y eterna enorme y la venta regalada de sus riquezas al precio de la necesidad de su gente. Ya lo vivieron con Menem y costó años sacar la cabeza del pozo, aún con gobiernos también de derechas pero populistas y ahora esto…

Pobre del clase media que cree en este sueño del líder demente que va a dar con el mágico don de levantar un país a costa de recortes y quitarle privilegios a los más desposeídos porque y realmente espero equivocarme y mucho pero creo que vienen tiempos muy oscuros para nuestros amados argentinos.

El “Marvel animated” de Jonathan Massey

El “Marvel animated” de Jonathan Massey
Por: Darío Valle Risoto

Si bien es muy difícil que alguna vez se pueda superar la calidad de la producción de DC de Batman animated (1992) dentro del género de los “Dibujos animados” evidentemente Marvel tuvo en las series de Spiderman del año 1994 y X-Men de 1992 un par de enormes éxitos tanto en calidad como en público, incluso hubo algún capítulo crossover entre estas dos series en su tiempo y dentro de muy poco se va a retomar la serie de los mutantes.

Pero siempre suelo decir que Marvel supera largamente las producciones de DC en el cine llamado: “Live action” más no en los dibujos animados, pero bien que esto es motivo de cada gusto en particular ya que ambas casas tienen ingentes trabajos de todo tipo en este rubro y es muy difícil determinar si una supera a la otra pero no podemos negar que el universo animado de Marvel inspirado en el mismo universo del cine de acción real tiene buenos méritos que al menos merecen ser tomados en cuenta.

Es que a partir del año 2013 e inspiradas por las películas del cine aparecen cuatro series animadas denominadas: Avenger Assemble, Ultimate Spiderman, Guardianes de la Galaxia y por último: Hulk and the agents of Smash, todas ellas bajo la producción de Jonathan Massei y con dos nombres como creativos que saltan a la vista si nos remitimos a la histórica serie de Batman Animated de la competencia, me refiero a Paul Dini como consultor creativo y Eric Radowsky en la producción.

Con idéntica calidad y conformando el mismo universo estas cuatro series remiten directamente (al menos tres de ellas) al mismo universo del cine y nos pueden servir a aquellos fans para profundizar en ello, aunque obviamente todo esto se inspira también en la serie “Ultímate” de Marvel en los cómics que intenta recrear a sus personajes con una nueva visión un poco más adulta en comparación con sus orígenes, podemos inevitablemente comparar esto con los cómics de los Nuevos 52 de DC donde también se intenta “modernizar” los orígenes de sus personajes con vistas a épocas más contemporáneas.

Tenemos en total catorce temporadas a saber: cinco de los Vengadores, cuatro de Spiderman, tres de Guardianes de la galaxia y por último dos de Hulk y los agentes de Smash. Al menos eso es lo que tengo, además hay una película de Los Avengers denominada. Avengers adventures forst Fight del año 2015. Digamos que inevitablemente tal como la saga del cine hay cruces entre unas y otras series con esa característica propia de Marvel de conformar un único universo más o menos coherente y quizás la serie de Hulk formando equipo con She-Hulk, el Hulk Rojo, Skaar (Una imitación de Conan) y Rock Jones sea la serie que más se aparta de esta influencia, más les recomiendo su cuarto capítulo llamado: El coleccionista donde veremos brevemente a otros integrantes del universo Marvel dentro de esta interesante historia.

Para terminar podemos estar seguros que todas estas series tienen una gran calidad, son muy entretenidas aunque quizás por momentos sean demasiado “infantiles” para mi gusto, recordemos que en el año 2010 apareció la serie: “Avengers los héroes más poderosos de la tierra” y que tras solo dos temporadas fue sustituida por esta tetralogía. Digamos que también inspirada por las películas del cine para muchos fue una pena que se cortara esta serie porque de verdad era magnífica, lo mismo ha sucedido con la serie de Spiderman “El espectacular hombre araña” del año 2008 que también duró solo dos entregas de temporadas y que para mi gusto como el de muchos más fue lo mejor que se ha hecho de arañita animado hasta la fecha. De todas maneras es muy interesante ver la saga del «universo araña» en la serie de Spiderman con los diferentes «Peters»

La constante revisión, renovación y vuelta a traer una y otra vez a los mismos personajes tanto en Marvel como en Dc si bien nos han traído buenas series muchas veces han optado por cortar algo que venía bien para buscar otros ángulos no siempre éxitosos pero me remito a lo antedicho, del espectador es la última palabra.

Hablemos de guitarras y algo más.

Hablemos de guitarras y algo más.
Por: Darío Valle Risoto

Allá por el año 1986 u 87 me compré mi primera guitarra eléctrica, era una cosa extraña armada con varias guitarras que sonaba de forma horrenda y que según mi amigo Juan había sido armada con diferentes pedazos por el responsable de la casa Doremi, una tienda que aún existe y que se especializaba en todo tipo de negocios como canje, compra, venta, reparaciones, etc. Casa muy mal vista por los músicos en aquellos tiempos pero que a los de poca capacidad económica al menos nos ofrecía alguna solución. Digamos que en esos tiempos era tremendamente caro el solo hecho de pensar en tener un instrumento y solamente los de cierto poder monetario podían tener su propia banda con un sonido más o menos decente.
Allí y con más de veinte años tuve mis primeras clases de guitarra primero con un profesor que me robaba la plata estirándome clases por clases haciéndome escribir música al re pedo hasta que el mismo Juan me enseñó en pocas clases prácticas y gratuitas lo más básico para ir haciendo un poco de música.

Al poco tiempo vendí esa guitarra horrenda y me mandé a hacer con Martínez una imitación de Fender Stratocaster, fue en 1988 y esos 120 dólares me costaron casi toda una licencia porque yo era más pobre que ahora y el dólar era mucho más caro en comparación que hoy día en el Uruguay. En esos tiempos estaba de moda hacerse las guitarras en “Vargas” quien trabajaba muy bien pero cobraba caro y además uno tenía que llevarle todos los componentes, el tipo solamente se encargaba de la madera y el armado final. Martínez lo hacía todo y cobraba mucho menos y doy fe que mi guitarra de su manufactura me acompañó por más de treinta años y en cuatro actuaciones en vivo con un muy buen sonido al punto de que cuando Juan rompió su Fender Telecaster en un accidente en moto se compró por mi consejo una guitarra Yamaha que siempre odió por desde luego sonar muy por debajo de su Fender histórica. Un buen día Juan probó mi guitarra y lanzó una enorme puteada porque según él sonaba mil veces mejor que la susodicha guitarra con marca de motocicletas.

El tema es que aquellos tiempos no eran como hoy que prácticamente se pueden conseguir todas las marcas y modelos de guitarras y bajos eléctricos, en esos años del siglo veinte eran pocas las que se traían para la venta y eran inmensamente caras. Por lo tanto cuando rompió la Fender y pidió mi consejo las únicas guitarras más o menos buenas en plaza eran las Yamaha.

Aquí me quiero detener en la razón de este artículo y es que hace un tiempo adquirí una guitarra Ibanez Gio, estas consideradas de baja gama porque desde luego son muy baratas, unos 300 dólares en comparación con la de alta gama que están por encima de los mil. Cuando en el año 2019 me compre un set completo de guitarra, amplificador, correa, púas, afinador, etc. todo estaba alrededor de unos 160 dólares y la guitarra es una Stratocaster marca Memphis que todavía conservo y suelo llevar a mis ensayos la mayoría de las veces.

Por lo tanto si comparo estas dos guitarras si bien la Ibanez cuesta casi el doble que la Memphis y suena mejor no hay demasiada diferencia entre ambas que a mi gusto me resultan muy buenas y por lo tanto cuando leo sucesivos artículos donde muchos opinan sobre guitarras, marcas micrófonos, etc. me quedo con la idea de que generalmente los músicos mediocres se detienen demasiado en estos detalles y estoy convencido que los buenos guitarristas pueden sonar bien prácticamente en cualquier tipo de instrumento, recuerdo varias veces en que juan tocaba mi guitarra “Martínez” y la hacía sonar como los dioses por cierto que mucho mejor que un servidor que es plenamente consciente de sus limitaciones.

Ustedes me dirán que mejor es mejor y es cierto, si bien un Fiat 600 y un Porsche son autos y sirven para desplazarse desde luego que no hay comparación a la hora de enfrentar sus diferentes capacidades, pero en el caso de la música me consta haber conocido a viejos amigos que cambiaban de guitarras y efectos de sonido sucesivamente buscando quizás la llave mágica para tocar mejor y me consta que esto solo se logra con práctica, práctica y más práctica.

Recuerdo imborrable fue el de aquel amigo que copió mi idea inicial de elegir una modelo Explorer negra y que quedó anonadado cuando en cambio me mandé a construir una exacta Stratocaster, yo había cambiado de idea porque si bien la Explorer es muy “metalera” tal como una “Flying V” o algún otro modelo de esos “raros” indudablemente las Stratocaster y en su defecto las telecaster son las guitarras más cómodas a la hora de tocar a diario y practicar, tanto como andar con ellas viajando a ensayar cuando uno debe andar en colectivos.

La guitarra no hace al guitarrista sino el guitarrista a la guitarra, bienvenidos sean los conceptos estéticos, de marca y prestaciones pero nada se compara con un virtuoso tocando un instrumento aunque este sea de baja gama como le llaman ahora, probablemente sea una buena idea ir mejorando nuestros instrumentos pero si nosotros mismos no progresamos como artistas de nada sirve tener la mejor “Gibson” de la tierra.