Jorane, mi último descubrimiento

Jorane
Por: Darío Valle Risoto

De vez en cuando este mundo de Internet me devuelve a viejos amores en el cine o en la música pero ultimamente tratándose de música no hay demasiadas sorpresas a no ser que uno busque, quiero decir que los grandes medios nos enfrentan constantemente a mucha basura musical y entonces vemos como decae el espíritu de los hombres masificandose al servicio de intérpretes y/o músicos que dan verdadera vergüenza, la lista sería enorme. Ayer, escuché un disco de Jorane que bajé de Baphomet v13, es su primer disco de 1999: Vent Fou. Y quedé extasiado por esta bella ejecutante del chelo de orígen Canadiense que además canta muy pero muy bien, su forma ecléctica de abordar el isntrumento me hizo recordar a otra grande: Emmile Autumm que les debo como artículo, pero Emmile es violinista y Joane toca el violonchelo con temas en inglés y en francés, este disco que escuché es obligatorio para aquellos que tienen como yo la nerviosa búsqueda de nuevos y constantes matices en forma musical. Pronto seguiré recorriendo su discografía, por lo tanto les invito a buscar su página en Taringa o pueden acceder desde Neo Vampiros a ella.
La van a disfrutar.

Discografía:
* Vent Fou (1999)
* 16MM (2001)
* Live au Spectrum (2002)
* Evapore (2003)
* The You and the Now (2004)
* Canvas or Canvass (internet project) (2007)
* Vers à soi (2007)


Gatos en verde

Gatos en verde
Vuelvo a compartir con ustedes mi colección de fotos digitales de gatos, en este caso se trata de una impresionante serie de casi treinta fotos de gatitos muy pequeños corriendo y retozando en el césped, fotos de excepcional nitidez y de una afortunada actuación de estos hermosos felinos que nos hacen la vida mucho más divertida. para no cansarlos publico no más de siete por vez, espero sus comentarios.

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Berenice 2

Berenice 2
Por: Darío Valle Risoto

La cadencia de una tarde gris
declina suavemente en una noche helada
y camina ella absorta en su tristeza
allí donde la muerte la acompaña.

Difumina la bruma sus ropas blancas
anidando en sus manos la rosa de escarcha
y sus labios son dos rojos anzuelos
que pescarán en los mares de la nostalgia.

Sola se detiene Berenice
buscando cuerpos donde no hay nada
escuchando el lamento de los violines
desde una dimensión fría y lejana.

Mausoleos de mármoles negros
son las puertas al país del alma
allí penetra en sueños Berenice
escapando de una vida desolada.

Esperan los príncipes de la noche
y las doncellas de la madrugada
para bailar y beber el vino amargo
de los amores que se irán a la mañana.

Vuelve a despertar de día Berenice
y sonriendo se enfrenta a la resaca
de los sueños que la llevan en la noche
a los mundos muertos de góticas comarcas.

Dedicado a la Berenice que vivió en La Teja

Berenice 2
By: Dario Valle risotto

The cadence of a gray afternoon
declines slightly in one night frost
absorbed it and walk in his sorrow
where the death of it.

Haze blurs his clothes white
nesting in their hands the pink frost
and her lips are red hooks
fishing in the seas of nostalgia.

Sola stops Berenice
searching for bodies where there is nothing
listening to the cries of the violins
dimension from a cold and distant.

Black marble mausoleums
are the doors to the country’s soul
there enters dreams Berenice
escaping from a life ruined.

Expect the princes of the night
and the maids in the morning
to dance and drink the wine bitter
of the loves that Iran is in the morning.

Back to waking day Berenice
and smiling faces hangover
of dreams that have been in the night
dead to the world of Gothic counties.

Algo pasó en el Metro (Cuento)

Algo pasó en el Metro
Por: Darío Valle Risoto

El metro estaba más lleno que lo habitual, Marcial se metió a los codazos y pidiendo perdón de tanto en tanto como era su costumbre de buen cristiano, terminó apretado entre una enorme mujer gorda, un hombre negro con olor a tabaco y unas estudiantes del “Sagrado corazón”. Todas las mañanas viajaba desde Santa Marta hasta Cañuelas donde caminaba unas ocho cuadras hasta el taller. No bien arrancó el enorme transporte que atravesaba su ciudad bajo calles, plazas y manzanas de edificios, la gente comenzó a reacomodarse lentamente. Observó que su mano izquierda estaba sobre la nalga derecha de una chica de aspecto indígena vestida con uniforme liceal y que su cara se apoyaba indiscretamente sobre uno de los pechos de la mujer gorda que parecía no preocuparse por ello. Marcial era un hombre bajo, de tez cobriza y rostro extremadamente maduro para solo tener veinticinco años, sería porque desde los diez trabajaba con motores y esas cosas que se había hecho a una vida difícil que todos le daban más edad.
Cuando el hombre negro se retiró para bajar a la próxima estación intentó quitar su mano del culo de la estudiante con tanta mala suerte que al querer retirarla esta lo malinterpretó.
___¡Viejo rasposo!
___Perdóneme no fue mi intención. ___Dijo con la cabeza mirando casi al piso bajo la risa de todas las chicas que acompañaban a la “tocada”. Pero su cara seguía cuasi un enano entre dos enormes cordilleras casi al borde de los pechos gigantescos de esa mujer interminable. El tren se zarandeó al dejar la estación Arredondo y lo empujaron, pisaron y le metieron las manos en los bolsillos del mameluco tres veces.
___¡Me lleva la chingada!, ¡Ya me robaron!. ___Gritó alguien pero nadie respondió.
Unos chicos pusieron sus celulares con música tropical a todo dar y una mujer saludó a un tal tío Florencio que en realidad no lo era, se había confundido, en la estación Belvedere bajaron algunos pero subieron más empujando a Marcial contra la puerta que da a otro vagón lejos felizmente de las estudiantes que le miraban como a un psicópata sexual.
___¡Dios es el camino, la luz y la gloria! ___Dijo alguien.
___¡Vete a la mierda!. ___Le contestó otro, Marcial miró su reloj pero tenía la mano tan abajo que creyó adivinar que se le hacía tarde.
Una señorita con perfume de lavanda se le apoyó contra el costado izquierdo, a su derecha tenía a un tipo de rostro de pocos amigos y por delante a un viejito con una maleta más grande que él.
___¡En Jesús encontraremos la salvación!___ Gritó el mismo.
___¡Que te den por culo! ___Contestó otro.
La señorita le sonrió y Marcial estaba tan cerca que creyó descubrirle en la cara ciertas trazas… ¿De barba?
Algo tenía entre las piernas que le venía molestando y el había pensado que era un paraguas aunque afuera no llovía.
Por fin se bajó en su estación Cañuelas, caminó por la escalera a la calle luego de ser casi sacado a las patadas del metro, por suerte el transvesti siguió viaje junto al que seguía gritando frases bíblicas mientras desde el tumulto le insultaban.
Caminó rápidamente rumbo al taller y de pronto se percató que en vez de la valijita de herramientas tenía una maleta de ejecutivo en la mano, al pasar delante de una vidriera tuvo que regresar para mirar a su reflejo.
___¡No puede ser!
Desde la enorme vidriera de la zapatería un hombre alto, de traje grís e impecable camisa blanca le miraba, era su reflejo, pero no de él sino de otro.
___¡Pero si yo soy morocho, bajo y visto de mameluco!
Marcial se fue a sentar a una plaza cercana, en el bolsillo de su traje estaban los documentos de un tal: Doralicio Céspedes Menchaca: Abogado.
Pobre Marcial, había viajado tan apretado que se le había cambiado hasta el cuerpo.
FIN

Este cuento se lo dedico a Mauricio Buitrago porque se me ocurrió gracias a un comentario suyo sobre el metro a razón de un artículo sobre la locura de los transportes colectivos que publiqué en este blog.

El extraño caso de Benjamin Button

El curioso caso del hombre viejo

Por: Darío Valle Risoto

Tenía algunas referencias de esta película que recién pude ver ayer, la primera era del crítico Miguel Angel Dobrich en radio Oceano FM del que tengo cierto respeto porque mantiene el nivel adecuado para comentar cine o al menos el que me gusta a mi, entre otras cosas comparó esta película con Forrest Gump y luego de verla estoy absolutamente de acuerdo con él ya que este largo larguísimo filme se trata de abarcar la vida de un hombre especial y su entorno intimamente relacionado con la historia reciente de su país: Estados Unidos. 

Benjamin Button nace viejo y va rejuveneciendo a lo largo del filme por lo que es una aventura muy curiosa la que nos toca vivir como colados espectadores que ven como a través de una ventana que este ancianito recobra fuerzas minuto a minuto y se encuentra y desencuentra con amores y por sobre todas las cosas con la gran protagonista que es: La Muerte, de allí la segunda referencia que tenía de este trabajo que vino de la querida Patty y su blog «La Guadaña», ella dijo algo así como que esta película era triste y es verdad, pero también es una historia donde el amor se manifiesta de las más diversas maneras, a veces con la sencillez de un marinero que lleva a Benjamin a conocer el sexo, el cariño por la madre que lo crió pese a todos los malos augurios y hasta el padre arrepentido que vuelve. Desde luego que Cate Blanchet se muestra hermosa, profesional e intensa como siempre y nada les puedo decir de Brad Pitt porque hace años nos ha demostrado que nunca se descansó en su lindura para ganarse los papeles.

Hay muchas joyas escondidas en este filme, una pequeña historia de como se accidentó la bailarina de ballet y las consecuencias de las diversas personas que llevaron a que un taxi la atropelle, la historia del reloj de la estación al principio y Benjamin como un espectador más de esta vida más curiosa que su extraña condición.
No se la pierdan.

La Locura Cotidiana

La Locura cotidiana

Omnibus en Montevideo
Por: Darío Valle Risoto

Viajar en colectivo se está transformando en un acto de corresponsalía de guerra para quién suscribe, desde luego que lo hago por no tener otra alternativa y entonces me tengo que cruzar a diario con todo tipo de especímenes a saber:
Ayer nomás un anormal iba sentado en los escalones que dan a la puerta de atrás, por lo que tuve que bajar tratando de no pisarlo, cosa que me gustaría pero todo sea por la paz, el tipo ni se inmutó y apenas miró para arriba, hacia mí cuando le pegué en la cabeza con mi mochila que por cierto llevo en la mano cuando viajo en colectivo y no colgada como la mayoría de mis solidarios semejantes.
Los vendedores ya sabemos que desde hace ya años frente a la creciente pérdida del habla se limitan en su gran mayoría a proferir sonidos guturales y nos tiran toda suerte de porquerías en la falda o nos la ponen encima de nuestros regazos cual si fuera un favor y pobre de aquel que se las devuelva.
___No gracias.
___Te dije que no, gracias.
___¡Pedazo de un imbécil!, ¡Te dije que no quiero estas galletitas de mierda que manoseó todo el mundo!.
También encontramos al marginal que nos cuenta una terrible historia de muchos hijos, desempleo y aberrantes anécdotas de crimen, violación y ex drogadicciones que van de la pasta base a sobredósis de toda suerte de sustancias.
___Y que dios les de el doble de lo que ustedes me dan a mi.
___¿Y porqué no le piden directamente a él y se evitan un intermediario?
Lo peor son esos hermosos niños que gritan canciones de Vicentico, La Vela o cualquier paupérrimo intérprete a toda voz y no pegando una sola puta nota, creo que la gente les da dinero para que bajen rápido y no porque sean necesitados. De eso se debe tratar… supongo.
Los nerviosos que escuchan música tropical en sus reproductores MP3 y tabletean con los dedos o las manos en todo fierro y pasamanos, asiento o cabeza de pasajero del vehículo.
___¿Qué te pasa enfermito?. Si te gusta el tambor ¿porque no te metés en una banda de candomberos y te dejas de joder?
La clásica vieja hecha pedazos que sube al ómnibus lleno, portando todo tipo de bolsos llenos de cualquier cosa al pedo y nos pega, pisa, empuja. Siempre me he preguntado si tienen miedo de no volver a entrar en sus casas u olvidar su dirección y por eso andan cual caracoles cargando sus viviendas encima.
___Señora… tome el asiento.
___mmmmm.
Nada ni un miserable gracias o una mínima sonrisa, la vieja se sienta y ni nos mira tal como si hubiera sido una obligación donarle el maldito asiento.
Las gordas elefantiásicas que ocupan un asiento y medio y todavía ¡Se sientan!, siempre aplastando a alguien contra la ventanilla o dejándonos medio culo afuera si nos toca el corredor, también no son menos los tipos que deben de sufrir inflamación testicular porque encime de ser barrigones se sientan con las piernas abiertas como si estuvieran solos en el jardín de su casa.
Los inspectores que despiertan al trabajador dormido y sin embargo no le piden el boleto a las pibas lindas, los mismos inspectores que nos rompen los oídos pegando con una moneda en la ventanilla para que los boludos que no se corren al final del vehículo se despierten y lo hagan mientras por el frente se meten personas tal cual se arma un embutido.
Los gansos y gansas que siempre se bajan por adelante aún teniendo la puerta trasera más cerca solo para joder a los que van a subir y los que suben sin mirar que los susodichos idiotas están por bajar.

Hay mucho más de la fauna que puebla nuestro mundo colectivo, gente que sin respeto alguno viaja a las trompadas, pisotones y empujones por la vida como si en el destino les deparara algo mejor, también están los funcionarios del transporte cada vez más animalizados, peores guardas y dementes conductores que frenan donde no deben, arrancan antes de tiempo y escuchan infames temas de cumbia a todo trapo.
Bueno los dejo porque creo que viene mi ómnibus…

Este artículo se publico originalmente en el Diccionario del Diablo

Batman – Creciendo con un Mito (2)

CRECIENDO CON UN MITO
Por: Dick Giordano
Traducido del Portugués por: Darío Valle
(Conclusión, viene de la parte 1)

Batman hace lo que hace por el mismo, por la necesidad, lo que la sociedad gana con eso es la consecuencia… mas no su razón primaria para sus actividades. Así cuando nos sentimos desconfortados con el lado negro de la naturaleza de Batman, aún así lo entendemos porque nosotros sabemos que no es cierto que no nos tentaríamos de hacer lo mismo que él si hubiésemos asistido al asesinato de nuestros padres.
Claro que yo no pensaba exactamente así en esa época, tenía apenas seis o siete años y era incapaz de un razonamiento de ese tipo. Para mi Batman era un justiciero aliñado, fuerte y experto con habilidades acrobáticas, mas sin super poderes. El era solo una cara común que aprendió a hacer un montón de cosas maravillosas, como ir de un lugar a otro con su batisoga, (Nunca pude saber donde la cuerda estaba atada o como Batman la amarraba, pero eso no me preocupaba.)
Yo sabía que podía pretender ser Batman, nunca podría ser Superman, no había forma de conseguir poderes iguales a los del super Hombre, yo precisaría haber nacido en otro planeta, pero nada me impedía ser como el joven Bruce Wayne y algún día ser igual a Batman.
Pero nunca comencé el entrenamiento y por lo tanto permanecí como una persona común, mas sabía que eso podía hacerse y allí residía la parte más atractiva del personaje que yo admiraba. Obviamente hubo muchos otros elementos que se agregaron a su aspecto básico de héroe, Bruce Wayne era rico, pasaba por un Playboy, eso era parte de la diversión. Yo me sentía involucrado cuando Bruce asistía a una fiesta porque sabía que él era Batman y que luego vestiría su máscara y entregaría a los bandidos a la justicia cambiando su papel de millonario antes de que la historia terminase. Nadie en la historia sabía mas que yo. Me gustaba también la relación padre – hijo entre Bruce y Dick Grayson, también conocido por Robin, su pupilo; y especialmente la relación con su fiel mayordomo Alfred, también la especial sociedad entre el comisionado Gordon y Batman, ambos sabían que eran efectivos trabajando juntos aunque eso nunca podría tornarse oficial. En cuanto crecía continué leyendo las historias de Batman, algunas cobraron significados diferentes a medida que yo maduraba pero continuaban siendo válidas para mí. En algún período de mi adolescencia decidí que no podía dejar mis alegrías de infancia totalmente atrás, a los trece años decidí ser dibujante de historietas. Yo deseaba que mi experiencia leyendo historietas fueran para mí el impulso de entretener a la gente como yo fui entretenido.
Consecuentemente fijé mis energías en ese objetivo y nunca pensé en hacer otra cosa de mi vida, por lo tanto aquel primer contacto con Batman tuvo un papel muy importante en la elección de mi carrera y fue el principal factor de mi permanencia en este campo por mas de treinta y cinco años. Me torné profesional de la industria de los cuadritos en Marzo de 1952, hice una montaña de cosas durante quince años, al final de mi período de entrenamiento comencé a trabajar para DC Cómics en 1967 (La editora se llamaba entonces National Periodical Publications), un nombre que disfrazaba su actividad principal de publicar historietas. De todas formas el trabajo regular de editar varios títulos de la DC fue muy gratificante, mi satisfacción era usar mi tiempo libre en una plancha de diseños haciendo arte final de historietas para otros editores, a todos les parecía gustar mi trabajo. Después de algún tiempo me entregaron una historia de Batman para hacer el arte final.
Ellos me dieron una historia de Batman, era como si me hubiese muerto y estuviera en el cielo.
En cuanto leía la historia y miraba los diseños fui transportado de vuelta para aquel día hacía muchos años cuando revolví ese montón de revistas y miré por primera vez la imagen de Batman. Mi reacción fue: ¡Estoy en casa de nuevo, completé un ciclo!. Era de perder la razón, simples palabras no podrán expresar mi alegría al permitirme hacer una contribución creativa para continuar la leyenda de un personaje que amaba y que era aclamado como uno de los dos más grandes héroes de ficción de nuestra era. Yo no podía estar más feliz. Aquel fue el inicio de mi relación con el caballero de las tinieblas, nunca el fin, desde entonces tuve la suerte de estar en el lugar justo en el momento justo, cuando la oportunidad de diseñar el arte final de Batman apareció.
Dick Giordano es uno de los mas respetados artistas y editores en el área de las historietas, actualmente es vicepresidente/editor ejecutivo de DC Cómics Inc. (Al momento de publicarse este artículo)

Supermercados Uruguayos

La Locura cotidiana
Por: Darío Valle Risoto

Uno de los grandes inventos yanquis son los supermercados, la idea es práctica como la mayoría de las ideas anglosajonas, se trata de colocar los productos a la vista del público ordenados por tipos, especies, clases, etc., para que la gente los elija; se matan dos pájaros de un tiro: uno elige por uno mismo y la empresa se ahorra empleados. Bien, bárbaro.

En Latinoamérica importamos este nuevo estilo comercial abocados a seguir las políticas del primer mundo con la errónea idea de que lo que es bueno para ellos, también debe serlo para nosotros, nada más lejano de la realidad.

Para empezar nuestra reducida capacidad craneal no ha hecho trasladar todos los vicios de aquellos viejos almacenes de barrio donde uno para comprar un kilo de azúcar, por ejemplo, debía ir con unas cuatro horas de antelación. En el primer mundo los supermercados son estructuras pensadas e ideadas para facilitar que los consumidores encuentren todo a la mano y cada cosa está ubicada de forma racional, en Uruguay NO.

Yo voy regularmente a dos supermercados: El Disco en la misma manzana donde trabajo y El Devoto que me queda a una cuadra de casa, también tengo un super de unos evangelistas cerca pero dejé de ir porque son unos mugrientos.

En el Devoto llegué a la conclusión de que hay un empleado especialmente capacitado para cambiar todos los días las pizzas de lugar, me refiero a esas para pobres, las que tienen un lengüetazo de salsa y uno tiene que adicionar con muzzarella para hacerlas comestibles. Hay por lo menos cuatro sectores en torno a la sección de carnes donde las pizzas viajan de un cubículo a otro, de una mesa a otra. En el mismo Devoto tienen cajas rápidas. ¡Ja!. Voy a hacer la prueba de poner un caracol a mi lado cuando haga una de estas graciosas colas y seguramente sus caracolitos ya estén graduados en la universidad para cuando yo salga. En el mismo Devoto tienen un encargado que pone cumbias prácticamente todo el día como música de fondo y si usted entra y ve como diez o más cajas y solo están funcionando dos, llámese afortunado porque a veces solo hay una y… La “rápida”.

En el Disco suelo ir para comprarme la comida de mediodía para el trabajo, a esa hora van todas las viejas que están todo el día al pedo, van juntas, deben de pertenecer al club secreto de las mismas ancianas rompebolas que entran llenas de bolsos a los colectivos. Amen de esto en la fiambrería del mismo Disco hay dos o tres empleados pero casi nunca atienden ni siquiera de a dos, siempre uno de ellos se encuentra envasando, pesando o contando porquerías mientras uno espera como un imbécil con el número en la mano. Hay un curioso cartelito detrás junto a las canillas que dice: “Jabonarse las manos”, no en-ja-bo-nar-se, pero eso es una bobada y tal ves también se pueda escribir así..

Este mismo Disco tiene cajas en la puerta principal, unas cinco o seis y dos en la salida trasera, indefectiblemente en la trasera habrá funcionando solo una y siempre que yo voy a pagar el de adelante lleva una tarjeta de crédito que no sirve, entonces tengo que esperar que llamen a una encargada para que habilite la cuenta, la deshabilite o elimine al imbécil que va a comprar cuatro pavadas a crédito, entonces ya con medio descanso perdido camino resignado hasta la puerta principal donde hay mas cajas. ¡Ja!, Busco la menos llena de gente en espera y cuando llego tiene una empleada nueva a la que le están enseñando a cobrar, dar el vuelto y casi ha respirar, imagino que por un sueldo grandioso. ¡A mediodía carajo!, ¿No pueden instruir a los nuevos operarios en horas menos colmadas de gente?

Por eso sostengo la teoría de que los latinos no estamos capacitados para muchas de las costumbres del primer mundo y nos merecemos arrastrar estos remedos de atención al público que son suertes de torturas sociales a la ¿Vivesa” criolla.

Grace is Gone

John Cusack es brillante
Por: Darío Valle Risoto

Si alguien guardaba aún la idea de que este actor no es demasiado bueno o carismático con este trabajo ya no habrá dudas de que se equivocaba. Esta película lo centra en medio de una historia humana y cotidiana, al menos para los Estados Unidos, donde los que quedan se deberán adaptar a la pérdida de sus seres queridos en una guerra absurda. ¿Pero cual no lo termina siendo?.
Stanley, su personaje, se resistirá a contarle a sus hijas la pérdida de Grace en la guerra de Irak y por lo tanto iniciará un viaje hacia una tierra de sueños, parque de diversiones temático en Miami, el viaje tendrá diferentes escalones hacia la confesión inevitable de que su madre militar murió cumpliendo con su deber.
Stanley deberá convencerse que de Grace lo último que escuchará, será el mensaje grabado en el contestador telefónico y así se irá uniendo a sus dos hijas de 12 y 8 años hasta el inevitable final del camino y regreso a casa.
Si esperan una película rodada a todo dar, esta no lo es, es casi una obra de teatro por su sencillez y el
comprimiso de sus intérpretes. Hay un cine de Hollywood que afortunadamente se puede considerar para un público inteligente.
Recomiendo especial atención en los diálogos sobre la guerra entre Stanley y su cuñado, así como con su hija, serán de lo más disfrutables y nos dejarán pensando en el punto de vista ajeno.

Gato Encerrado

GATO ENCERRADO
A pedido de Wendy les publico una serie mas de fotos de gatos en diversos escenarios pero siempre buscando la forma de postergarse como los animales más extraños y maravillosos de este mundo y… tal ves del otro.
Uno grande y otro chico, es de esperarse que el pequeño se ponga a perseguir al más viejo
Bueno, no sabemos si es un Siberiano o un Lobo, creo que al gatito le importa poco.

¿Será el Batigato?
Pero este seguramente no es el gato de Superman, creo que no vuela.