Ip Man 2: Tan buena como su predecesora.

Ip Man 2
Por: Darío Valle Risoto

Esta continuación de la película sobre este formidable maestro del Kung Fu trata de los años posteriores de la segunda guerra mundial y específicamente cuando él y su familia se afincan en Hong Kong donde no cesan los problemas, primero al tratar de conseguir discípulos para mantenerse económicamente y luego frente a la mafia de los dojos que pretenden cobrarle una cuota de “protección”.

Tenemos por lo tanto grandes lecciones sobre lo que los chinos defienden como dignidad humana y que suele estar muy por encima si se me permite de nuestros valores occidentales. Esto queda demostrado cuando se da la pugna con los británicos que en esos años tenían este puerto de china a por quienes son mejores si los boxeadores occidentales o los maestros del Kung Fu de china.

Que la película sigue siendo de artes marciales como su predecesora es cierto, pero si ustedes vieron la primera no podrán desprenderse de esta que es tan buena como la anterior con protagonistas sumamente realistas y un argumento que no tiene ninguna zona negra. Ip es un referente para sus discípulos pero también terminará no solo siéndolo para otros maestros sino también para la antedicha puesta a punto de aquellos valores como honor, ética y dignidad que los occidentales parecemos olvidar rápidamente.

Vuelvo a reiterarles que Ip se hizo famoso por ser el maestro de Bruce Lee quien a mi entender fue más un personaje que una persona real y quiero creer que con este gran hombre aprendió algo mucho más importante que dar puñetazos y patadas.

Escenas realmente atrapantes, una pelea con el campeón de boxeo absolutamente inigualable y todo el entorno cultural y social que podemos esperar de una serie de películas que espero mantengan este particular ritmo de primera calidad.

 

Ip Man: No solo una historia de artes marciales.

Ip Man
Por: Darío Valle Risoto

Ip Man o Yip Man refiere a la historia del maestro de Kung Fu que en la China de los años treinta vive cómodamente en su mansión hasta que todo cambia y debe enfrentar al duro golpe de la invasión japonesa con los consiguientes desmanes provenientes del duro imperio que somete a los chinos a la muerte y la esclavitud.

Esta es una película de artes marciales pero está inspirada en uno de los maestros más famosos de China quien entre otros contó años después con el propio Bruce Lee de discípulo. En esta primera película del año 2008 que cuenta con tres continuaciones, las que aún no vi, podemos asegurar que si bien los momentos de acción y combates son muchos hay un sólido argumento sobre lo antedicho: la guerra y los desmanes cometidos por los japoneses en el continente asiático.

El Yip Man era un hombre muy tranquilo con un aparente lento manejo de las cosas, pero que en combate demostraba estar más allá de los límites de la imaginación porque parecía moverse con una absoluta presteza anticipando cada movimiento de uno o más contrarios.

Esta película por lo tanto es un documento histórico que sobrepasa la mera entrega de golpes y patadas del cine comercial de artes marciales que tanto hubo allá por décadas pasadas y con toda las técnicas cinematográficas modernas se sostiene perfectamente en un argumento tan sólido como los puños del protagonista.